La Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) realizó este martes un simulacro en el Aeropuerto Internacional Astor Piazzolla de la ciudad para poner en práctica el Plan de Emergencia Aeroportuaria (PEA).

Según indicó la Administradora Nacional de la ANAC, Paola Tamburelli, en el lugar se recreó un “eventual accidente que tuvo que ver con una situación en donde una aeronave de pequeño porte, de aviación ejecutiva, impacta con un avión comercial, se incendia y a partir de ese momento se dispara la alarma y se sigue adelante con todo lo que establece el PEA, que fue diseñado para este aeropuerto de acuerdo al tránsito y a sus distintos servicios”.

De la actividad participaron “todos los denominados miembros de la comunidad aeronáutica”, entre los que se incluyó a bomberos de la Policía Federal, bomberos de la ciudad, personal de la Cruz Roja, el Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME), la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) y actores de la compañía de teatro local, quienes ayudaron a que “esto tenga una utilidad de sentir lo real que genera este tipo de situaciones y a prever qué podría suceder”.

Además, Aerolíneas Argentinas puso a disposición una aeronave para que se pueda llevar a cabo el simulacro en el aeropuerto de Mar del Plata.

En este sentido, Tamburelli precisó que se buscaron detectar las falencias que puede tener el PEA, con el objetivo de optimizarlo en el marco de un “esquema de mejora continua”.

“Esto es una actividad dinámica, requiere que todos conozcan su rol y este tipo de procedimientos nos integra”, agregó la Administradora Nacional de la ANAC.

Seguidamente, adelantó que “ahora comienza un análisis muy profundo de lo realizado”, pero indicó que “con una primera aproximación” se puede establecer que las cuestiones esenciales del aeropuerto local “están garantizadas”.

No obstante, reconoció que se pudieron identificar “aspectos a mejorar en comunicaciones entre distintos actores de la comunidad”, los cuales “desde hoy mismo se pusieron en contacto para tratar de allanar los procedimientos y mejorarlos”.

El operativo de salvataje fue regulado desde el sector de Comando de Operaciones de Emergencias por un equipo de observadores técnicos, que analizaron todos los aspectos del PEA.

El entrenamiento formó parte del cumplimiento de las normas y recomendaciones de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), que es la autoridad aeronáutica a nivel mundial.

Una vez que culminó el simulacro, se restablecieron de inmediato las operaciones en el aeropuerto.