La postura del Emder ante la polémica por los Bonaerenses
Pedirán una reunión a la Subsecretaria de Deportes de la provincia para plantear que la totalidad de las finales se hagan en la ciudad.
El Parque de los Deportes de Mar del Plata.
La edición 2021 de los Juegos Bonaerenses, que se ha llevado adelante con tanto esfuerzo y tantos cuidados, enfrenta una encrucijada de cara a las finales provinciales.
Históricamente, en sus 30 años de existencia, la competencia iba transitando etapas locales y regionales, hasta determinar la clasificación de los finalistas, que participaban por los campeonatos en la esperada etapa final que siempre se realizó en Mar del Plata.
Sin embargo, en el retorno a la presencialidad (los de 2020 fueron los de la virtualidad) desde la Subsecretaría de Deportes bonaerense, con el aval del gobernador Axel Kicillof, se tomó la decisión de descentralizar la Gran Final Provincial.
A la distancia, allá por julio o agosto, desde el punto de vista sanitario se trataba de una medida lógica. Pero ahora, que la situación epidemiológica ha evolucionado notoriamente -a tal punto que se anunciaron numerosas flexibilizaciones- no parece tan atinado.
Sobre todo, porque genera complicaciones adicionales desde el punto de vista logístico y económico. Así le explicó a LA CAPITAL el presidente del Emder, Andrés Macció.
“La logística para poder desarrollar ese plan de finales descentralizadas es muy compleja, no solo para General Pueyrredon, sino también para otros municipios de la provincia. Nosotros, como ente de deportes, hemos enviado una nota a la Subsecretaria Deportes solicitando una reunión para plantear la posibilidad de otro escenario. Si no se desea concentrar a todos los finalistas en una misma semana, se podría dividir en dos semanas, o incluso en tres”, explicó.
Y también agregó que “con el cambio sustancial de la situación sanitaria de hace unos meses atrás a la fecha, esta redistribución no tiene mucha lógica”.
De acuerdo al plan original, en cuatro días, del jueves 28 al domingo 31 de octubre, Mar del Plata recibirá a unos 2.000 jóvenes que competirán en las siguientes disciplinas: automovilismo (karting), beach volley, freestyle rap, malambo, solista vocal, fútbol 11, skate, básquetbol 3×3, fútbol playa, fútbol freestyle y stand up.
Para las otras disciplinas, se han designado a diferentes municipios, los cuales albergarán las finales de otras actividades, entre el 2 y el 20 de noviembre.
“No me parece que en este momento sea necesario realizar un desdoblamiento de estas características -agregó Macció-. Esto implica viajes por toda la provincia, en algunos casos, hay que ir tres veces al mismo lugar en fechas distintas. Más allá de la ayuda económica que aporta el gobierno provincial para los traslados y las estadías, los municipios deben afrontar costos enormes por esos viajes adicionales, incluso para llevar a competir a un lugar a específico a uno o dos atletas. Deportivamente tampoco se entiende. Vamos a insistir porque sin dudas no es lo mejor para competencia. Salvo que haya otra cuestión de por medio”, sostuvo.
En ese sentido, no es ilógico pensar que haya un profundo trasfondo político. La sede natural de las finales provinciales, Mar del Plata, o el partido de General Pueyrredon, es gobernado por Juntos por el Cambio, un distrito que históricamente le ha dado la espalda a la coalición que rige los destinos a nivel nacional y provincial (Frente de Todos).
Curiosamente -o no tanto-, los municipios designados para la descentralización de las finales, son todos gobernados por el peronismo: Lomas de Zamora, Pilar, Avellaneda, Bolívar, San Fernando, General Rodríguez, Malvinas Argentinas, Villa Gesell, Laprida, Mercedes, Morón, Hurlingham, Quilmes, La Matanza y Tigre, además de Necochea (liderado por un partido vecinalista).
Por caso, para la Etapa Regional, los deportistas marplatenses recorrieron 4.000 kilómetros para viajar a competir en diferentes deportes. Ahora, con este cronograma descentralizado, deberían viajar otros 20.000. ¡Cinco veces más que para la etapa anterior! Claramente algo que carece de sentido común.
“Sabemos que las realidades de todos los municipios son diferentes. Pero también sabemos que todos quieren venir a Mar del Plata. Es una tradición de 30 años para todos los finalistas. Tenemos los escenarios, la hotelería, la playa. Consideramos que toda esa ilusión y la situación epidemiológica favorable, merecen que se haga todo lo posible para poder trabajar sobre una idea que lleve a una organización lo más parecida a las Finales tradicionales”, concluyó el titular del Emder.