De La Voz Argentina a lanzar disco y libro: la historia de la enérgica Nekare
Fue parte de la primera edición de La Voz Argentina. Acompañó a Lizy Tagliani. La convocó Muscari. Cantó en Finlandia. Sin embargo, la artista de voz poderosa y cabello colorido considera que lo mejor viene ahora: disco, libro y original ciclo en las redes sociales.
Histriónica, dice: "Aprendí de cero y logré enamorame de mi voz".
Por Paola Galano
“Creo que es lo más hermoso que me pasó en mi vida, no lo puedo creer, con los chicos nos miramos y decimos ‘¿nosotros hicimos ésto?'”. Una eufórica Natalia Nekare tiene listo su primer disco: “6000 días”. Un recorrido por varios estilos, con canciones en inglés y en castellano compuestas y cantadas por ella y trabajadas musicalmente junto a su banda: Matías Marano, Daniel Susperreguy, Cristian Suárez, Frankz y Nicolás Humeniuk.
Ahora, punto de lanzarse al mundo con este disco, a Nekare -así, a secas como también se la llama-, parece importarle menos todos los otros pergaminos que atesora su rica trayectoria.
“Siento que éste es el primer gran paso de mi carrera”, dice.
Recordemos: en 2012 fue parte de la primera edición de La Voz Argentina, Miranda la eligió en su equipo. Luego, en 2015 llegó Dar la nota, un programa de El Trece en el que también participó. Más tarde desembarcó en teatro: fue parte del show “Liberate”, con Lizy Tagliani, rol por el que fue nominada a un Estrella de Mar. Y unos veranos después, integró el multitudinario elenco de “Bollywood”, la obra de José María Muscari que llegó al Teatro Auditorium. Semejante currículum parece estar en un segundo plano para esta mujer de imagen cambiante, seductora y con voz de trueno.
“Siento que generamos algo tan bello (por el disco) que quiero y no quiero tirarlo al mundo. Es muy loco: siento que éste es el primer gran paso de mi carrera”, sigue, en una larga entrevista con LA CAPITAL, siempre enérgica.
Hoy, a la distancia de aquella notoriedad, Nekare -se hizo conocida en La Voz Argentina por su cabellera de colores, su estilo poderoso y por combinar la música con el trabajo en el taller de autos de su papá– reflexiona: “Todos esos trabajos me curtieron como artista. Pasar por la La Voz fue tremendamente importante en mi vida, ahora lo estoy terminando de asumir. Es que yo venía del under, del rock y le di mucho peso a quienes me decían ‘¡eh careta qué hacés ahí!’ Aclaro que fueron las mismas personas que cuando me fui de La Voz me dijeron que ellas se iban a presentar. Sentí una especie de culpa después de que salí de La Voz. Eso hizo que no aprovechara las posibilidades”.
Escuchá la versión de Natalia Nekare de “Hello”:
No obstante, mira esa etapa “con mucho cariño” y reconoce que fue ahí, en La Voz Argentina, con un público enfervorizado, una banda en vivo detrás que sonaba impresionante y ella siempre hiper producida en el escenario donde descubrió que eso, cantar, era definitivamente lo suyo. Ni arquitectura, ni veterinaria. La música: “Esto me encanta”, recuerda que pensó.
Además, la marplatense también cantó en Finlandia, la tierra de su amada banda Nightwish, con la mágica Tarja Turunem como voz principal y referente.
Pasados aquellos escalones, Natalia brilla ahora con una luz más propia. La gestión independiente la devolvió a su océano: el under. Y la exposición mediática nacional que alcanzó a partir de lucir su gran talento vocal es parte de un pasado que le otorga identidad, nada menos.
A “6000 días” se lo conocerá este mes de septiembre. En el terreno de las redes sociales (@nekarenkr en Instagram y @NataliaNekare en Facebook) Nekare irá dosificando la aparición de las canciones. Es allí, en la virtualidad, donde expone todo su potencial, en tiempos de restricciones de shows en vivo. “Vamos buscando la euforia en otros lugares, las redes son útiles”, describe. Y son el espacio donde también ejercita las Microcanciones.
“Cuando era más chica procastinaba un montón -confiesa-. Por eso me queda el miedo de colgar las cosas, el pánico, prefiero subir o mostrar algo que no es perfecto a esperar a que esté perfecto, porque el perfeccionismo termina siendo una herramienta para no hacerlo, para postergar”.
Así, en Microcanciones se obliga a cantar una canción, a grabar el video, editarlo y subirlo a sus redes en un día o dos como máximo.
“Compongo mucho y la mayoría de mis canciones terminan en una carpeta -cuenta-. Quise trabajar de forma rápida, exigirme pero hasta cierto momento. Es un ejercicio de meter la emoción pero no me da tiempo a pensarlo”. El ejercicio detiene su obsesión por la perfección, pero no detiene su pasión, que se aviva cuando enseña a cantar y cuando habla del poder de la voz. La de docente de canto es, acaso, la faceta menos conocida de la histriónica Nekare.
“Acá es cuando me vas a tener que parar”, dice, al ser consultada sobre su rol docente. “Canto es vulnerabilidad, canto es exposición aunque estés solo frente de tu profe, es animarte a mostrar una parte tuya que presenta más matices que cuando estás hablando, ya hablar frente a la gente es difícil… imaginate cantar una canción, que pone en evidencia tu fragilidad. Hay cierta comodidad en decir ‘esto no es para mi porque los cantantes profesionales nacen con talento o no nacen con talento’… Eso me da una bronca”.
Que el talento se aprende, que los ejercicios constantes son clave para desarrollar la voz y cómo funciona el aparato fonador, entre otros conceptos, serán parte del libro que escribe y que tituló: “Tan connatural como cantar”.
“Que sea un amuleto de validación para las personas que quieran escucharse, que sientan la compañía y la validación en contra de toda la vulnerabilidad que nos presenta cantar, yo lo viví y quiero concentrar en un libro toda las herramientas que aprendí”, enfatiza. “Yo tuve que aprender de cero y logré enamorarme de mi voz”.
Para aprender a cantar, necesitó conocer los “fundamentos lógicos”, investigó sobre el tema de las cuerdas vocales y sobre el mismo cuerpo, en su rol de receptor y resonador de la voz.
“Leía los estudios clínicos que mostraban cómo funcionaban los pulmones, la laringe, me puse a leer papers que me obligaron a buscar terminología en Google y descubrí que es un sistema complejo y maravilloso, a veces se lo trata con liviandad, porque asumimos que como todos hablamos cantar es fácil”, cierra.
Escuchá la versión de Best of you: