Los dos hombres que habían sido detenidos en el marco de la investigación por el asesinato de Jonathan Nahuel “Coché” Sanche, ocurrido el pasado 9 de julio en la Villa Beruti, quedaron en libertad luego de que la Justicia de Garantías considerara que había falta de mérito para ordenar la prisión preventiva.

Si bien José “Kito” González y José “Lula” Galán recuperaron la libertad, aún están imputado por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” y son los principales sospechosos en la investigación que lleva la Fiscalía N° 1.

Jonathan Nahuel Sanche, que debía cumplir con arresto domiciliario, por una condena de 14 años por haber asesinado a una persona en 2015, fue asesinado el viernes 9 de julio a la tarde de un disparo en la cabeza, mientras circulaba en moto por la Villa Beruti.

La hipótesis de la fiscalía es que Sanche había sido asesinado en una suerte de ajuste de cuentas y que los autores fueron, justamente, González y Galán.

“Kito” y “Lula” quedaron en el centro de la investigación y sus nombres también llegaron a los allegados de Sanche, quienes buscaron venganza y quemaron las casas de los acusados.

Acorralados por la Justicia y con miedo a caer en manos de los allegados de Sanche, el martes 27 de julio González y Galán, acompañados por su abogado particular Cristian Prada, se presentaron en Tribunales y quedaron detenidos.

Desde un principio la fiscalía tuvo pocas pruebas contra Galán, por lo que quedó en libertad a los pocos días. En el caso de González, la falta de mérito la decretó el juez de garantías Daniel de Marcos en las últimas horas, por lo que también recuperó la libertad.

Versiones enfrentadas

Desde un principio, la hipótesis de la fiscalía es que a Sanche lo mataron mientras circulaba en moto por la villa Beruti, un ataque orquestado y dirigido hacia él para matarlo por conflictos previos, relacionados a la venta de droga. Lo que tiene su lógica por los antecedentes que posee y su relación al mundo del delito.

Sin embargo, “Kito” González al declarar ofreció otra versión de los hechos: la de la legítima defensa al haber sido asaltado por Sanche.

Según esta versión, González se encontraba afuera en la calle cuando fue sorprendido por “Caché” Sanche y otro hombre, quienes lo amenazaron con un arma de fuego y le robaron el celular y otras pertenencias.

En palabras del propio González en la fiscalía, él reconoció a Sanche y sintió “miedo” ya que sabía que se trataba de un hombre peligroso. En medio del robo se generó un forcejeo y pelearon.

“Lula” Galán se encontraba a unos metros, al escuchar gritos corrió hasta donde estaba su amigo y lo ayudó al trenzarse en una pelea con la persona que acompañaba a Sanche.

En ese contexto, de un robo, pelea y forcejeos, es que se habría “escapado” un disparo de la pistola del propio Sanche que lo hirió de gravedad y lo mató.

Esta versión planteada por González estaría sustentada por el testimonio de dos testigos con identidad reservada que fueron aportados por la defensa y, además, porque entre las pertenencias de Sanche se encontraba el celular que le había robado a “Kito” González.