CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
Policiales 31 de julio de 2021

Un trasfondo de deudas y amenazas es la clave en el crimen de Guasone

Personal de la DDI atrapó a Ricardo "Ricky" Aguerrido sobre quien la fiscal Romina Díaz considera tener pruebas para sindicarlo como autor del asesinato del empresario Ezequiel Guasone.

Ricardo Aguerrido fue detenido

Ricardo “Ricky” Aguerrido, el acusado de asesinar al empresario Ezequiel Guasone, fue detenido esta tarde después de permanecer prófugo desde el viernes.

La división Homicidios de la DDI Mar del Plata localizó a Aguerrido en la vivienda de un familiar en la zona de Castelli al 4000, donde aguardaba una entrevista con su abogado defensor, César Sivo, para ponerse a disposición de la fiscal Romina Díaz. “Es su propia intención la de constituirse a derecho”, había manifestado Sivo en su escrito de aceptación del cargo a la vez que también había pedido el acceso al expediente antes de presentar a Aguerrido.

A Aguerrido se lo acusa de ser el autor del homicidio de Guasone, el empresario que el domingo al mediodía apareció ahorcado dentro de su local de San Lorenzo y San Luis. Aguerrido era el inquilino de esas instalaciones que pertenecían a Guasone y entre ambos se habían producido algunos conflictos en los últimos tiempos por razones vinculadas al cumplimiento del contrato.

Lo que la fiscal Romina Díaz considera incriminatorio es ese contexto de conflictividad entre Aguerrido y Guasone a partir del vínculo contractual entre ambos. No hay una prueba directa, hasta el momento, que asome como indiscutible y la acusación está basada en cuestiones periféricas. Por ejemplo, distintos testimonios aseguran que Aguerrido había amenazado en varias ocasiones a Guasone para reclamarle el pago de una deuda y Guasone se había mostrado atemorizado por esa actitud.

Tal como lo había adelantado LA CAPITAL, a mitad de semana, los problemas entre Aguerrido y Guasone eran netamente económicos. Todo se inició con un presunto incumplimiento de Aguerrido en el alquiler del local donde alguna vez funcionó el exitoso restaurante Pietro y que pertenecía a Guasone.

Según familiares de la víctima, los pagos no se hacían en tiempo y forma, e incluso el propio Guasone habría admitido que la “droga” era una moneda de cambio. El deterioro que se veía en el local en el último año -Aguerrido fracasó en un salón de eventos y en una cervecería, y vivía allí- había provocado preocupación en Guasone y por eso decidió comprar el fondo de comercio. Esa operación, de acuerdo a lo que consta en el expediente, habría sido realizada por un amigo de Guasone con el objeto de sacarse a Aguerrido “de encima”.

El trato fue por 14 mil dólares pero luego Aguerrido exigió que se le saldara la deuda que Guasone tenía por más de 1.700.000 pesos. Esa deuda -cuyo origen se investiga si está vinculada a la compra de estupefacientes- fue renegociada la semana pasada y uno de los pagarés debía pagarse el lunes. Guasone contaba con el dinero para hacerlo.

El sábado el empresario decidió dirigirse al local supuestamente ya recuperado para ponerlo en condiciones y alquilarlo a un centro de estudios médicos. Sin embargo nadie supo de él por horas hasta que se hizo la denuncia por averiguación de paradero. El cadáver de Guasone, colgado del cuello a una mesa por medio de un collar y con algunos golpes, apareció en el interior del local de San Lorenzo y San Luis.

La investigación del hecho a cargo de la comisaría segunda se inició con un presunto escenario suicida, pero luego los informes forenses confirmaron la intervención de terceros. También hubo levantamiento de rastros y se hallaron solo huellas de Aguerrido. Este detalle fue tenido en cuenta por la fiscal Díaz pese a que Aguerrido vivía en el lugar y sus huellas estaban por todos lados.

Por el momento existen fuertes indicios de que Aguerrido pudo haber cometido el delito de amenazas y sobre el homicidio las pruebas no parecen tener tanta fuerza. Se aguardará el reporte analítico del teléfono celular de Guasone, secuestrado en el lugar de los hechos, y este lunes a las 10 Aguerrido prestará declaración ante la fiscal.