VIEDMA (E).- Quilmes empezó con el pie derecho su andar en los play-offs de la Liga Argentina de Básquetbol.

En un partido cambiante, que pareció tener sencillo y finalmente se le complicó horrores, dio una muestra de carácter y se impuso 72-67 a Lanús en el primer partido de la serie de cuartos de final. Este lunes, otra vez a las 11, irá por otra victoria que lo deposite en las semifinales.

Casi como en Olavarría. Así de superior fue el primer cuarto de Quilmes sobre Lanús. Así de dominante. El equipo “tricolor” impuso las condiciones defensivas, volvió a maniatar a la dupla de extranjeros “granate”, fue una máquina de provocar errores y rápidamente obtuvo un quiebre.

Hacia la mitad del cuarto inicial, con gol en todas las manos, sacó diez puntos de ventaja. Y en la parte final de ese segmento consolidó esa luz manteniendo el tono defensivo y explotando los movimientos de Brown, nuevamente imparable en la pintura. El 27-10 de los primeros diez minutos fue elocuente.

Lanús, sin embargo, no se entregó tan mansamente como la última vez que se enfrentaron. Sin Everett -el DT Costa no tuvo paciencia con su inconsistencia defensiva-, el equipo “granate” produjo una reacción. Le hizo bien el ingreso de Franchino, calibró la mira de sus disparos exteriores y aprovechó bien un par de circunstancias. La primera fue la transitoria salida a descasar del base Facundo Gago, de muy buen primer cuarto. La segunda, la salida por un inconveniente en uno de sus tobillos de Jeffrey Merchant, el mejor socio de Brown.

Salvo Brown, siempre productivo cuando recibió la pelota, Quilmes no pudo mantener el tono. Lanús recortó diez puntos de la desventaja y se puso 31-38 a poco del descanso. Pese al triple de Marquardt para cerrar el primer tiempo, ya era otro partido.

La presión del elenco “granate” se acentuó en un tercer cuarto problemático para Quilmes. Por un lado, Everett volvió muy bien al partido para liderar la ofensiva de los suyos. Por otro, Quilmes falló tiros de alto porcentaje. Por último, Brown cometió cuatro faltas personales y tuvo que irse a descansar.

El equipo marplatense, en lugar de jugar el partido, pasó a aguantarlo. Lanús cerró el tercer cuarto ahí nomás (52-55) y solo porque el DT Costa decidió hacer descansar unos minutos a Everett cuando mejor estaba.

El cuarto final empezó con un triple de Lucas Pérez que igualó el partido y de ahí en más fue palo a palo. Quilmes, aún con varios errores conceptuales a la hora de jugar sus ataques, se sostuvo en partido con un par de triples y un gran esfuerzo defensivo mientras Brown no estuvo.

Cuando el estadounidense regresó, el equipo de Gelpi vio un pedacito de cielo. Brown resolvió un ataque con su sello y a falta de 27″ atrajo marcas y dejó libre a Ortiz, quien puso el marcador 70-67 a favor con un triple vital. El ex Olímpico había sido decisivo poco antes con una tapa monumental para frustrar una bandeja de Pérez que pretendía estirar la ventaja de los suyos a cuatro puntos.

Lanús falló sus intentos de tres puntos posteriores a esa conversión de Ortiz y, desde la línea, Quilmes remató una victoria que parecía sencilla y que terminó sacando de la galera.

Síntesis

Quilmes 72
F. Gago 7, R. Pelorosso 9, L. Ortiz 11, J. Merchant 13 y T. Brown 20 (FI); B. Marquardt 12, D. Skidelsky 0, A. Ecker 0 y A. Reinick 0. DT: Manuel Gelpi.

Lanús 67
L. Pérez 9, L. Ibañez 7, A. Mariani 15, L. Gilmore 12 y J. Everett 9 (x) (FI); M. Franchino 7, M. Marín 2, F. Sampaulise 6 y N. López Allebrandt 0. DT: Leo Costa.

Estadio: “Ángel Cayetano Arias” de Deportivo Viedma.
Árbitros: Julio Dinamarca-Enrique Cáceres-Florencia Benzer.
Parciales: 27-10, 41-31 y 55-52.