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Policiales 5 de junio de 2021

Se había disfrazado de policía para cometer un violento asalto: condenado

Agostino Carriño (28) recibió una pena de 7 años y 6 meses por un violento robo cometido en 2019 al titular de la empresa El Rápido del Sud. Además, fue considerado reincidente.

Un hombre de 28 años que en 2019 se había disfrazado de personal policial de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) para poder ingresar en la vivienda del titular de la empresa “El Rápido del Sud” y asaltarlo fue condenado a 7 años y 6 meses de prisión en un juicio abreviado realizado en el Tribunal en lo Criminal N°4.

Agostino Carriño (28) fue condenado por los delitos de robo triplemente agravado por su comisión en lugar poblado y en banda, por el uso de arma de fuego y por escalamiento; resistencia a la autoridad y abuso de armas en concurso ideal; robo agravado  por el uso de arma de fuego y  encubrimiento. Además, fue considerado reincidente, ya que en 2016 había sido condenado a 4 años y 6 meses de prisión en otro hecho de robo agravado.

El fiscal Mariano Moyano, en su investigación pudo comprobar que Carriño y otras tres personas protagonizaron el violento asalto ocurrido el 25 de octubre de 2019 en una casa de Formosa al 1300.

En esa oportunidad, Carriño y otro hombre, ambos vestidos con indumentaria policial de la Dirección Departamental de Investigaciones, descendieron de un Volkswagen Bora, en el que otros dos hombres se quedaron en el interior, tocaron el timbre de la casa de Formosa al 1300 y explicaron que estaban allí para tomar declaraciones en una casa por estafa.

El propietario de la vivienda resultó ser el dueño de la firma “El Rápido del Sud” quien los dejó entrar. La situación cambió radicalmente cuando el hombre les pidió las identificaciones, lo que inmediatamente generó que los supuestos policías se violentaran, exhibieran sus armas de fuego y tiraran a las víctimas al suelo, para luego esposarlas y exigirles objetos de valor.

Un llamado al 911 alertó a la policía de la situación. Ante la llegada de un móvil, Carriño recibió información desde el exterior y ordenó la huida por los fondos del lugar, por lo que se dieron dos fugas en simultáneo: el Volkswagen Bora por un lado y los dos delincuentes que estaban en la casa por otro.

Mientras escapaban, Carriño y el otro hombre dispararon al menos dos veces a la policía. Además, interceptaron a un auto, amenazaron a los ocupantes con las armas de fuego y lo robaron. Lo que les facilitó escapar.

Por su parte, los hombres que iban en el Bora chocaron contra otro auto en Quintana y Santa Fe, lo que los obligó a abandonar el vehículo en ese lugar y escapar a pie.

En la investigación, el fiscal Moyano pudo determinar que el Volkswagen Bora había sido robado días atrás y presentaba pedido de captura. Además, las víctimas dijeron que el día anterior, uno de los delincuentes -quien resultó ser Carriño- había ido hasta la casa para preguntar por el titular de la empresa “El Rápido del Sud”. Esto fue una clara señal de la planificación del golpe que pensaban cometer.

Las pericias realizadas fueron categóricas: una de las huellas levantadas en el Volkswagen Bora resultó ser del condenado. Además, en rueda de reconocimiento fotográfica todas las víctimas señalaron a Carriño como uno de los falsos policías y, sobre todo, como quien parecía tener la voz de mando.

Toda esta carga probatoria hizo imposible de ser refutada por la defensa técnica de Carriño, que no le quedó opción que aceptar la culpabilidad y la condena de 7 años 6 meses propuesta por el fiscal Moyano en el juicio abreviado.

Baleado al incumplir el arresto domiciliario 

En marzo de 2019, Agostino Carriño fue baleado en el abdomen en la vía pública y tuvo que ser trasladado al Hospital Interzonal, donde le salvaron la vida los médicos gracias a una intervención quirúrgica de urgencia. Lo que llamó la atención es que el joven, que en ese entonces tenía 26 años, debía haber estado en su casa cumpliendo con el arresto domiciliario impuesto por la Justicia.

Agostino Carriño cuenta con antecedentes por diversos robos a mano armada, por robar junto a un grupo de personas, por portación ilegítima de arma e incluso por haber privado ilegítimamente de la libertad a una persona. Por los hechos más recientes de robo a mano armada y robo en poblado y en banda, el titular del Juzgado de Ejecución Nº 2, Juan Galarreta, le había concedido prisión domiciliaria.