Paula Pareto ensayó el adiós a los 34 pero ahora, con 35, su cuerpo no da más
"Después de Tokio me voy a retirar definitivamente porque hay muchas lesiones acumuladas y con la edad todo cuesta un poco más", afirma la judoca argentina.
Paula Pareto durante un combate con la japonesa Tomoko Fukumi. Foto: EFE | Kimimasa Mayama.
por Sebastián Meresman
La judoca Paula Belén ‘Peque’ Pareto, que en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 se convirtió en la primera y hasta ahora única mujer argentina en obtener una medalla de oro, anunció que los de Tokio serán los últimos de su vida y el punto final de su exitosa carrera.
La pandemia, que ha retrasado un año la celebración de los Juegos Olímpicos de 2020, también dio un vuelco a los planes de la médica traumatóloga que el 16 de enero cumplió 35 años.
Pero si bien la fecha del adiós ha cambiado, el lugar elegido sigue siendo el mismo.
“Después de Tokio me voy a retirar definitivamente porque hay muchas lesiones acumuladas y con la edad todo cuesta un poco más. Llego bien con 34 años, pero más no”, prometió Pareto hace un año, en febrero de 2020, poco antes de que irrumpiera la pandemia del coronavirus.
Cuando los Juegos de Tokio se pospusieron, Pareto consideró que la postergación le resultaba “muy adecuada” porque, dijo entonces, lo principal es “la salud”.
Para evitar rumores, aclaró que no pensaba retirarse antes de la cita de Tokio, que sería su cuarta experiencia olímpica luego de las versiones de Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2016.
Pareto ganó la medalla de bronce en Pekín, recibió diploma en Londres y se colgó el oro en Río de Janeiro.
Por esto, es la única mujer argentina con dos preseas olímpicas en competencias individuales.
También obtuvo el Campeonato Mundial en Kazajistán en 2015, fue segunda en Rusia 2014 y tercera en Azerbaiyán 2018.
Su palmarés incluye múltiples medallas en diversos torneos.
Durante 2020 se dedicó de lleno a su profesión en el Hospital de San Isidro, en la provincia de Buenos Aires.
En octubre de 2020, Pareto, que un año antes se había sometido a una operación por una hernia cervical, obtuvo la medalla plateada en el Grand Slam de Budapest.
Su sueño paró al perder en la final ante la kosovar Distria Krasniqi.
Un mes después ganó en la ciudad mexicana de Guadalajara su sexta medalla de oro. Ocurrió durante un campeonato Panamericano y la alcanzó al vencer en la final a la local Edna Carrillo.
En enero pasado, en el Masters de Doha (Catar), cayó en el repechaje ante la mongola Urantsetseg Munkhbat y no pudo acceder a la lucha por la medalla de bronce.
Poco antes de ese torneo había reafirmado su voluntad de decir adiós a su deporte en la capital de Japón.
“Después de Tokio ya me retiro porque mi cuerpo no da más”, dijo.
Una eventual postergación de los Juegos Olímpicos por cuestiones sanitarias podría poner en duda la participación de esta emblemática deportista nacida en San Fernando el mismo año que Argentina conquistó el segundo Mundial de fútbol de la historia.
La luchadora en la categoría de -48 kilogramos que comenzó a practicar el judo a los 9 años, hoy cree que el éxito va más allá de las medallas y los títulos.
Ser feliz es lo primero.
“Siempre digo que la clave es aprovechar el día a día y hacer todos los esfuerzos que valgan la pena. Para mí el éxito es justamente ser feliz con lo que uno hace, sin depender de los logros o las medallas”, expresó recientemente.
EFE.