Por Natalia Prieto
No solo se distingue por su altura física, sino por sus planteos sobre cómo armar una coalición competitiva de cara a las próximas elecciones. Esa es una de las razones por las que el senador nacional Martín Lousteau juega en las internas radicales apoyando a Gustavo Posse, tal como mostraron días atrás en la ciudad. El dirigente pide mayor fortaleza y protagonismo del radicalismo y más apertura de Juntos por el Cambio.

Reconocido por la gente, tal como sucedió mientras posaba con el mar de fondo para LA CAPITAL, insiste con las críticas a las conducciones partidarias cerradas, reclama la realización de las PASO y no descarta postularse a jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires.

-Como economista, ¿qué perspectivas ve para este 2021 año electoral?

-Argentina tuvo este año una caída del PBI muy grande, de dos dígitos, y el PBI por habitante quedó a niveles del año 73 con 10 veces más pobreza. Naturalmente que después de una caída de semejante magnitud lo que ocurre es un rebrote, pero creo que la fortaleza de ese rebrote depende mucho de la perspectiva de los argentinos sin importar en qué sector estén y perciban qué tenemos a futuro. Y me parece que la perspectiva que está transmitiendo el Gobierno no genera el suficiente entusiasmo para que Argentina tenga un crecimiento más allá de un rebote que, a mi entender, no va a ser tan fuerte este año.

-De cara a la próxima interna radical, de acuerdo a los resultados, ustedes ¿con qué postura van a sentarse a la mesa de Juntos por el Cambio?

-Eso tiene que ver con la pregunta anterior, ¿qué puede generar expectativa para que el futuro de Argentina sea distinto? Creo que el kirchnerismo va a profundizar su tendencia y que los sectores más duros van a tener más peso en las listas y creo que Juntos por el Cambio tiene que mostrar en esta elección que hay una mejora, más gente que se acerca, más espacios políticos, más amplios y mejores. Eso tiene que ver con caras nuevas, con espacios políticos nuevos y con reglas nuevas.

-¿Qué quiere decir reglas nuevas?
-Para que una coalición funcione no puede haber uno que esté mandando, sino impone siempre su perspectiva. Ahora, para que uno no esté mandando, el resto tiene que ser fuerte. Digo que los lugares no se reclaman, veo radicales que han estado en el gobierno anterior apoyando y ahora reclaman un lugar cerca del asiento del conductor, conducir o más participación. La participación no se reclama, se gana, con voz, con votos y con gestión. Es muy difícil reclamar gestionar si uno pierde las PASO 8 a 1 como se perdió en 2015. ¿Qué tiene que hacer el radicalismo? Tiene que fortalecerse en serio, generar candidatos en todos lados, abrirse a los PASO para que surjan nuevos liderazgos locales y nacionales. Se nos va a escuchar en un gobierno si lo que decimos le interesa a la gente.

-Fue embajador del anterior gobierno en Estados Unidos pero se volvió. ¿Por qué, le parecía poco democrática la conducción de Cambiemos?

-Yo nunca estuve en Cambiemos. Competí en 2015 y se me convocó para la embajada en Estados Unidos y siempre dije que iba a volver a competir en internas en Cambiemos en 2017. Eso es lo que quise pero ellos no, entonces competimos con nuestra propia lista. Volví porque represento un espacio dentro de la coalición que piensa distinto y quiere que eso se manifieste de cara a la gente, para que la gente elija. Cuando no se escuchan esas voces diferentes, cuando no hay una discusión sana dentro del espacio, se cometen errores. Y cuando algo no funciona como debería, y las voces son siempre las mismas, tampoco es muy sencillo explicar a la gente por qué las cosas van a ser distintas a futuro. Entonces hay que oxigenar la coalición para que haya mejores discusiones internas; y mejores discusiones internas hay si a las distintas partes las escucha la gente, sino uno no tiene derecho a reclamar. Nosotros queremos un radicalismo que hable de otra manera, que tenga otro protagonismo, que quiera gestionar y tener propuestas.

-Mientras que desde el Gobierno plantean cambiar o suspender las PASO, en el radicalismo van a su propia interna en marzo.

-Planteamos las PASO en la ciudad en 2017 y no quisieron darla y por eso fuimos forzados a hacerla.

-¿Por qué piensa que no se las dieron, por miedo a perder?

-Eh, creo que hay algo de eso. Hay algo que se repite en Argentina: el que está no quiere que lo desafíen. Parte de nuestro principio hace que todos los liderazgos son desafiables y tienen que serlo de cara a la gente, porque esa es la manera de mejorarnos. En la convención radical de Parque Norte (2019) llevamos la postura que había que hacer PASO dentro de Juntos por el Cambio y había que tener otro candidato a presidente que compitiera con (Mauricio) Macri. El radicalismo que está enfrente nuestro (en la próxima interna) no quiso eso. No sé por qué las dan o no las dan, sí sé que quien está en el poder no quiere que los desafíen. Y las PASO son una manera en que la oposición se organiza para desafiar y se vuelve mejor. Creo que eso está detrás del Gobierno hoy tratando de no hacer PASO, de suspenderlas. Suspender algo tan fundamental como las reglas electorales en una democracia o querer cambiarlas por conveniencia le hace muy mal a la calidad de la democracia.

-En 2008 vivió el enfrentamiento con el campo en primera fila, ¿la situación actual con el sector es un déjà vu?

-La situación es distinta en muchos aspectos: hay menos plata, hay que incentivar que los lugares donde pueda haber producción e inversión en la Argentina crezcan.

-¿Qué papel va a jugar en las elecciones de 2021?

-Tengo mandato como senador nacional, quiero hacer lo mejor para construir una mejor coalición de Juntos por el Cambio. Quiero que vengan aquellos que no quisieron estar, los que se fueron, y eso no solo incluye espacios políticos o personas: Margarita Stolbizer o (el intendente de Rosario) Pablo Javkin. Quiero construir una alternativa más grande de cara a la gente otra vez. Creo que hay un 10 por ciento de la Argentina que es el que osciló cuando el kirchnerismo abusó del poder, no quiso más eso, y votó a Cambiemos. Y cuando los resultados económicos no fueron los prometidos, se desencantó y votó al otro lado. Quiero mostrar un rumbo futuro tal que ese 10 por ciento vuelva a confiar en nosotros, en algo mejor de nosotros.

-Falta una eternidad, más en Argentina, pero ¿se va a postular para presidente en 2023?

-Voy a estar, lo digo en serio, con varios dirigentes de este espacio y muchos que ustedes no ven que son aquellos intendentes que gestionan bien, que tienen que crecer, tanto en la provincia de Buenos Aires como en otros lugares. Quiero que todos esos dirigentes que tienen vocación de gestionar surjan, cobren más protagonismo en la coalición, que son los que pueden llevar adelante otro gobierno. Y voy a estar donde mejor pueda cumplir ese rol para el colectivo.

-¿Entonces jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires?

-Jefe de gobierno o cualquier otro lugar. Nací en la ciudad de Buenos Aires y cuando no me tocó estar en el exterior viví ahí siempre. Es la ciudad que me gusta, que amo, preparé un equipo para eso, trabajo hoy codo a codo con Horacio (Rodriguez Larreta). Me encantaría, pero lo que más me gustaría es construir un espacio colectivo que vuelva a señalar un rumbo para todos en Argentina.