El boliche de Playa Grande, “Bruto”, adonde la joven tucumana de 24 años se le negó el acceso por su apariencia física, emitió un comunicado y justificó el accionar del personal a “los parámetros de funcionamiento establecidos por la pandemia de COVID-19″.

Sofía Ortiz Andrada, una turista de 24 años, hizo público este jueves que el boliche le prohibió el ingreso el último lunes pese a tener reservado un box para ella y sus amigas. “No me dejaban entrar por tener sobrepeso”, expresó.

“El equipo de Bruto lamenta profundamente los hechos ocurridos el 11 de enero en sus instalaciones y desea expresar sus sinceras disculpas a las personas que se hayan sentido afectadas”, explicó el boliche en un escrito que difundió por las redes sociales. Y agregó: “si bien las medidas tomadas por nuestro personal se realizaron en el marco de los parámetros de funcionamiento establecidos por la pandemia de COVID-19, entendemos que la forma de aplicarlas pudo haberse malinterpretado“.

En este sentido, desde Bruto aclararon que “bajo ninguna circunstancia muestra intención fue ofender a alguien y que condenamos enfáticamente todo acto de discriminación y violencia hacia las personas”. “Conductas de esa índole se encuentran en las antípodas de nuestra pensamiento”, remarcaron.

Tras el lamentable hecho, los propietarios del boliche ubicado en Playa Grande además mencionaron: “nos pusimos en contacto con la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Municipalidad de General Pueyrredon, cuyo equipo brindará una capacitación en Buenas Prácticas Respetuosas de los DDHH a todo nuestro personal” con la intención de “evitar futuros desaciertos”.

“Nuevamente pedimos disculpas a todos aquellos que se hayan sentido afectados y reiteramos nuestro compromiso en la lucha contra la discriminación y la violencia en todos sus formas“, cerraron el comunicado.