Por Hernán Kloosterman

“La verdad, me encantaría estar unos metros más adelante, bien cerca del mar, pero no puedo”, dice con una sonrisa Carlos Bianco desde un sillón en el contrafrente del NH Gran Hotel Provincial que le ofrece un panorama visual en el que sobresale la playa.

El jefe de Gabinete bonaerense luce tranquilo horas después de la reunión con los intendentes de la costa atlántica. Si bien admitirá ante LA CAPITAL su preocupación por la suba de casos, la imagen que se lleva de Mar del Plata -dice- es mejor que la que se ve por televisión.

Sostiene que la temporada es “positiva” y que se cumplen los protocolos. “Siempre hay excepciones, y se pone el foco en la excepción. La regla no se muestra porque no es lo que vende, sobre todo en televisión”, analiza en un mano a mano en el que abordará la situación de Mar del Plata, las restricciones, el vínculo con los intendentes y la llegada de la vacuna.

“No hay ninguna discriminación política en la entrega de la vacuna, como no la hubo en toda la asistencia financiera que dio el gobierno provincial durante el año”, destaca.

-¿Primera evaluación de la temporada?

-La primera cuestión, que es positiva, es que estamos teniendo temporada. Hace tres meses nadie pensaba que podíamos tener una temporada razonable. Obviamente, hay menos turistas que en un verano récord, algunos rubros están razonablemente bien y otros han sido más golpeados por restricciones que tuvimos que aplicar. Pero hay que mirarlo positivamente. La cantidad de turistas que hay, para estar en pandemia, es bastante alta. Lo veo positivamente.

-¿Hubo oposición de los intendentes a las restricciones?

-No, hubo algunos matices respecto del horario, sobre todo. Fue una discusión bastante sana, hubo un buen diálogo y fue acatado por todo el mundo. Se comprendieron las razones, nadie dijo que era una medida que no iba a tener sentido. Estamos teniendo un proceso constructivo, sobre todo, con la parte de la oposición que tiene responsabilidades de gestión. Inclusive, sería un poco extraño que los intendentes critiquen una medida que gobernadores de su signo político han tomado, o el jefe de Gobierno de Capital. No estamos haciendo nada muy distinto a lo que se hizo en Buenos Aires.

-La primera cuestión, que es positiva, es que estamos teniendo temporada. Hace tres meses nadie pensaba que podíamos tener una temporada razonable.

-Tras varios meses de aperturas y cierres, ¿queda la sensación de que cada decisión puede ser algo injusta o contradictoria?

-Gobernar implica tomar decisiones que no siempre tienen impacto positivo para todo el mundo. El Presidente y el gobernador establecieron que la prioridad es la salud y después también privilegiar el trabajo y la producción. Desde el primer momento, cuando hicimos las primeras habilitaciones, siempre fuimos por el camino de la producción y el trabajo: lo primero que habilitamos fueron las fábricas. También hay que entender que hay actividades que son menos esenciales que otras.

-¿Cómo evalúa los controles?

-Se está trabajando de manera muy coordinada con los intendentes. También hay controles sanitarios y de cumplimiento de los protocolos para los trabajadores. Me parece que se están implementando de manera correcta. Pero es imposible detectar toda las situaciones de incumplimiento. La población en general ha cumplido de manera razonable. Siempre hay excepciones, y se pone el foco en la excepción. La regla no se muestra porque no es lo que vende, sobre todo en televisión.

-¿En las rutas se han relajado los controles?

-Yo vine manejando de La Plata y me pararon tres veces y me pidieron el certificado Cuidar. Si te paran tres veces en la ruta es porque hay controles.

-La pandemia generó un pico histórico de desempleo en Mar del Plata. ¿Por dónde ve la salida?

-Hay una salida a esta situación que es la vacuna. Es la única salida posible. Por eso es tan importante para nosotros el proceso. Desde el ala dura del macrismo, que no tiene responsabilidad de gestión, nos atacaron por el aislamiento, porque decían que eran insuficientes las habilitaciones que realizábamos, por el origen de la vacuna, porque llegaba tarde y ahora que llegó, dicen que son pocas.

-A propósito, se cuestionó la llegada de 900 dosis a Mar del Plata, cuando municipios mucho más chicos recibieron 450.

– Las cajas son de 450 y no se podía mandar menos de eso. No se pueden fraccionar. No hay ningún tipo de discriminación política en la entrega de la vacuna, como no la hubo en toda la asistencia financiera que dio el gobierno provincial durante el año. Más allá de lo que les corresponde a los municipios, hicimos una asistencia de 25 mil millones de pesos. En el peor año económico en mucho tiempo, no hubo ningún municipio que haya dejado de pagar salarios. Parece raro, nadie lo reconoce pero fue por los 25 mil millones que se otorgaron como una definición política de Kicillof. Nunca van a encontrar al gobernador haciendo discriminación de ningún tipo y especie.

Estamos teniendo un proceso constructivo, sobre todo, con la parte de la oposición que tiene responsabilidades de gestión.

-En caso de que no se pueda contener la segunda ola, ¿hay margen para pensar en un cierre como el inicial y en más asistencia económica?

-Siempre que tengamos que restringir actividades productivas comerciales o económicas, vamos a tener que establecer medidas de compensación. Quizás no alcanzan a compensar la caída de los ingresos pero va a haber un piso.

-¿Qué imagen se lleva de la temporada en Mar del Plata?

-Que es la mejor temporada posible, con gente que en general se cuida mucho. La gente es consciente y también se asusta. Hoy todos tenemos amigos o parientes que se han contagiado. Me llevo la foto de un gran esfuerzo que se ha hecho desde los tres niveles de gobierno, de los bonaerenses en general con algunas excepciones e incumplimientos que tendremos que seguir trabajando.

“El plan de obras va a funcionar
como motor de la economía”

Carlos Bianco se refirió a los desafíos del gobierno provincial, por fuera de la pandemia, aseguró que la agenda productiva de 2021 va a estar “muy enfocada a la obra pública” y resaltó que el plan de obras “va a funcionar como motor de la economía del sector privado en general”.

“Desde la campaña el gobernador dijo que las prioridades iban a ser la educación, la salud, la producción y el trabajo. Ese es nuestro trazo grueso de políticas. Si bien obviamente cambiaron las prioridades por la pandemia, seguimos con esa agenda”, definió.

Por otra parte, el jefe de gabinete de Axel Kicillof se remontó a los días finales del mes de agosto cuando la pandemia estaba en su pico.

“Vivimos con mucha preocupación en la medida que aumentaban los casos y se iban ocupando las camas. Lo bueno es que nunca a nadie le faltó un respirador ni una cama. No sucedió en la provincia de Buenos Aires, sucedió en Nueva York, en Roma, en París, en Barcelona y en muchos lugares del mundo”.