“Somos el mejor equipo del mundo”
Juan Manuel Vivaldi, con 185 partidos internacionales, aseguró que había un "convencimiento" de que podía darse este título olímpico. Gonzalo Peillat explicó por qué hubo jugada elaborada en el primer corner corto y tiro suyo en el segundo.
Por Vito Amalfitano
Desde Río de Janeiro, Brasil
Los Leones también tuvieron su columna vertebral, más allá de la capacidad y el valor de todo el equipo que se consagró campeón olímpico de hockey sobre césped, en la soñada tarde del jueves en Deodoro, tras la victoria sobre Bélgica por 4 a 2, en la final de Río 2016.
Y de esa columna vertebral los dos principales pilares fueron el arquero, Juan Manuel Vivaldi, y el goleador y mejor tirador del mundo, Gonzalo Peillat. Ambos charlaron con LA CAPITAL momentos después de la ceremonia de coronación, todavía sobre el campo de juego.
Juan Manuel Vivaldi es uno de los experimentados del equipo. Con 37 años, el arquero de Banco Provincia ya había sido campeón panamericano dos veces, en Guadalajara 2011 y Toronto 2015, y había ganado medalla de bronce en el Mundial de La Haya, donde empezó a gestarse este grupo, pero él, además, ya acumula 185 partidos internacionales y había estado en otros dos Juegos Olímpicos: Atenas 2004 (11°) y en Londres 2012 (10°).
-¿De quién te acordaste en el momento de la consagración, Juan Manuel?
-De mi familia, de mis hijos, de mis padres, de mis hermanas, de toda la gente que me acompañó en esta carrera todo este tiempo.
-Con sinceridad, ¿Estabas realmente convencido de que esto podía pasar?
-Totalmente. Antes de empezar el torneo tuvimos una reunión entre nosotros. Muy sincera. Salieron cosas muy lindas. Y de ahí surgió un convencimiento de que podíamos hacer historia en esta competición. Estábamos todos convencidos. Y es lo que se vio a lo largo del torneo. El equipo se mantuvo firme, sólido y lo buscó de la mejor manera hasta el final.
-Y ese convencimiento, ¿en qué se basaba? ¿En el juego, en la técnica, en el grupo…?
-En todo, la verdad que en todo eso. Fue una conjunción de cosas, un buen feeling, la confianza del equipo, el mismo sentimiento. Lo sentíamos así. Con tranquilidad, sabíamos que podíamos hacer un gran torneo y pelear por una medalla y finalmente es lo que se vio.
-Es muy fuerte sentirse los mejores del mundo. Porque si estaban convencidos de que podían salir campeones…
-No sentirnos los mejores del mundo. Eso no lo teníamos que sentir antes. Sí sentir que teníamos armas para hacer un gran torneo y pelear por una medalla para Argentina y hacer algo histórico. No sentirnos los mejores. Pero sabíamos que podíamos hacer una buena competencia y pelear de igual a igual hasta el final.
-Pero resulta que ahora sí son los mejores, no sólo por el resultado sino también, como dice Retegui, por el juego, por la manera en que lo consiguieron…
-Sí, sí, ahora lo podemos decir. La verdad es que.. somos el mejor equipo del mundo, sí…
Peillat, calidad y tiro en los cortos
Con Gonzalo Peillat, el goleador y mejor tirador del mundo, ya habíamos hablado después de sus tres tantos sobre Alemania en ese memorable 5 a 2 del miércoles. Y ahora LA CAPITAL le preguntó si tras esa gran actuación en la final se sentían realmente unos “Leones”…
“Sí, el partido con Alemania fue clave para la confianza, para el envión animico. En la final no bajamos los brazos en ningún momento. Bélgica planteó un partido muy táctico en el principio pero lo supimos contrarrestar y eso fue por nuestra fuerza mental, por nuestra confianza”, respondió Peillat.
-Qué jugada te mandaste en el primer corto…
-La verdad es que sí, lo habíamos analizado muchísimo con Agustín (Mazzilli), creo que era la mejor solución para romper la defensa de ellos en los corners. Ellos iban a salir a muerte a bloquear mi tiro, así que lo abrimos para sostener efectividad en el corto.
-Mezclaste calidad en ese corto con tu poder de definición en el otro…
-Y sí, por ahí cuando hacés una jugada como la que hicimos en el primer corto, el otro equipo se queda dudando sobre lo que vas a hacer y ahí nos decidimos para el remate directo.
-¿Cuáles fueron las principales virtudes del equipo?
-Creo que la mayor virtud estuvo en la confianza del equipo. Cada jugador individualmente creyó que lo podía lograr y el grupo en general también lo supo. Tenemos una camada brillante de jugadores pero fue una virtud no sacar los pies de la tierra.
-Consiguieron lo que Las Leonas no pudieron. Al final ustedes lograron este oro olímpico que a ellas se les escapó un par de veces…
-Bueno, sí, la verdad es que es una tristeza lo de Las Leonas y a nosotros nos duele mucho por el hockey. Pero considero que Las Leonas tienen un futuro increíble, viene una camada de jugadoras muy buenas, sólo hay que saber encaminarlas para los próximos Juegos Olímpicos. Ahora nos toca celebrar a nosotros. Por ahí nos llegó este torneo en un momento de más maduración del equipo.
-¿Qué soñás para tu carrera ahora?
-La verdad que después de esto es una pregunta difícil. Pero ahora hay que mantenerse. Mantenerse en lo más alto lo que más se pueda.