BUENOS AIRES.- Boca sufrió más de lo esperado para eliminar a Internacional de Brasil, al que derrotó por penales 5-4 en definición, tras caer 1-0 en La Bombonera (mismo resultado por el que se impuso en Porto Alegre). Por la efectividad desde los doce pasos, el equipo de Miguel Angel Russo pasó a cuartos de final de la Copa Libertadores, instancia en la que se medirá con Racing.

Boca padeció el partido. Jugó mal y se encontró con un rival que levantó mucho su rendimiento respecto a la ida.
Internacional impuso su fútbol desde el inicio del juego. Salió más decidido y demostró un juego con pelota que no había tenido en Porto Alegre. Además, contó con un futbolista muy desequilibrante: Patrick, quien desbordó cada vez que se lo propuso por izquierda.

El conjunto brasileño mereció irse en ventaja en la primera mitad. Thiago Galhardo impacto un remate en el travesaño y también estuvo cerca con un cabezazo que contuvo Andrada, en ambos casos asistido por Patrick. El arquero también estuvo seguro ante un envío de cabeza de Edenilson.

De Boca, poco y nada. El mediocampo se vio superado, no logró disputar la posesión ni fue efectivo en la contención. Y los delanteros quedaron aislados. Villa casi no apareció y, así, dependió de los arrestos individuales de Tevez.

Inter pudo hacer justicia en el marcador en el primer ataque del complemento, a los 2′. Nuevamente llegó hasta el fondo por izquierda, desde donde envió un centro fuerte y bajo Moisés; y Fabra -¿quiso despejar de taco? tocó de zurda hacia su propio arco. Gol en contra.

La visita mantuvo la intensidad sólo unos minutos más y después, más cansado y en ventaja, cambió la estrategia: esperó agazapado. Boca salió del asedio, pero no encontró creatividad para profundizar con pelota. Nuevamente fue Tévez el que tuvo que hacer casi todo para poner en peligro el arco rival: desde la izquierda enganchó hacia el centro y sacó un remate que desvió el arquero Lomba. Y recién sobre el final volvió a llegar con peligro con un remate lejano de Cardona que pasó muy cerca.

En los penales, Boca fue más efectivo y se desahogó con la clasificación, para seguir soñando con la séptima.

Empate en Porto Alegre

Gremio rescató anoche un empate agónico (1-1) ante Santos, en el encuentro de ida que ambos conjuntos brasileños protagonizaron por cuartos de final de la Copa Libertadores. Un penal convertido por Diego Souza, en el décimo minuto de tiempo adicionado, le posibilitó al equipo local evitar la derrota. Santos se había puesto en ventaja por intermedio de Kaio Jorge, a los 35 minutos del período inicial.