Carlos Rottemberg y el verano teatral: “Será una temporada solidaria, atento al momento que vivimos”
El empresario teatral confirmó el regreso de El equilibrista, más espectáculos de humor y musicales en el complejo Atlas-América y Mar del Plata. Y habrá obras marplatenses en sus salas. "Voy a utilizar un término muy teatral: se impone 'maquillar' la temporada", dijo.
El regreso del unipersonal de Mauricio Dayub, “El equilibrista”, reestreno previsto para el 26 de diciembre, y la puesta en escena de espectáculos humor popular con un equipo de cómicos y comediantes más atracciones musicales son las propuestas que anticipó el empresario Carlos Rottemberg para tres de sus salas: el Teatro Mar del Plata y el complejo Atlas-América.
Además, el productor indicó que destinará una de las salas del complejo de Luro y Corrientes a las propuestas de teatro marplatense, de acuerdo al perfil solidario que le imprimirá a la próxima temporada.
“Mantuvimos varias reuniones virtuales con los teatros independientes (de Mar del Plata) ofreciendo alguna sala grande para alternar funciones, de ser necesario y sin cargo alguno, para las que no pudiesen llevarse a cabo en sus espacios. A la vez nos haremos cargo de una campaña publicitaria difundiendo todas esas obras en general”, contó.
“En época de pandemia todo se trastoca. La actividad cultural debe abroquelarse sin distinciones y quienes se encuentren en mejores posibilidades asistir al sector que más lo necesita”, definió Rottemberg.
Asimismo, indicó que trabaja en estos días para poder definir la grilla de espectáculos “el próximo fin de semana con miras a largar la temporada a partir del sábado 26 de diciembre”.
A su vez, se mantuvo cauto a la hora de abrir el complejo de salas teatrales Lido, Neptuno y Bristol, ubicado sobre la calle Santa Fe de esta ciudad. “Un edificio como el de la calle Santa Fe no nos garantiza la misma seguridad en cuanto a ventilación y distanciamiento social, interno y externo” que los teatros de Atlas-América y Mar del Plata, que tienen veredas anchas en las que es posible cumplir con el distanciamiento social.
“No es una temporada para jugarla sin estudiarla a conciencia desde lo sanitario. Necesitamos que cada espectador que nos visite tenga la convicción de ingresar a un lugar seguro, machacando en los protocolos, por ellos y nuestros trabajadores y artistas”, precisó.
-¿Cómo será la temporada?
-Será un verano atípico también en nuestra actividad. Habrá espectáculos, siempre con la mira puesta en lo sanitario, ante una situación que impone rigurosidad en salud por encima del show. No dudo que habrá un variado menú de propuestas, claro que sin llegar en cantidad de títulos a lo histórico de otras temporadas. Todas las variantes que incluyan las actividades al aire libre y soportes recuperados como el autocine, teatro callejero, carpas y tinglados, los shows desde los automóviles y el teatro tradicional en todos sus circuitos se entrecruzarán en una oferta artística variada. Habrá de todo, pero acotado. Voy a utilizar un término muy teatral: se impone “maquillar” la temporada, ofreciendo servicios cuidados al turista, defendiendo fuentes laborales ante el peor cuadro de desocupación en la ciudad y con un mensaje empresarial autoimpuesto: empatar es ganar. Y mucho.
-¿Será una temporada solidaria?
-Nuestra empresa ya definió cómo celebrar sus 43 años teatrales en la ciudad. Será una temporada solidaria, así la llamo, atento al momento que vivimos. Por eso lo primero que hicimos, aún antes de ser habilitada la actividad con público presencial hace ya varias semanas por el gobierno de la Provincia, fue ofrecerle apoyo irrestricto al conjunto de artistas locales que durante todo el año no pudieron desarrollar su tarea en sus pequeñas salas, careciendo de ingresos.
-¿Piensa en presentar muchos espectáculos como otros años?
-Justamente mantuve diálogo con el Intendente Guillermo Montenegro y su responsable de Cultura Carlos Balmaceda. Vamos a medir cada paso. Por lo pronto abriremos las salas de la esquina de Luro y Corrientes y el teatro Mar del Plata. La mayor capacidad de esos ámbitos, las veredas anchas de la avenida para evitar concentraciones de personas en las puertas de acceso y la mejor ventilación de esos edificios nos permiten estar mejor preparados para una buena atención por parte de nuestro equipo de trabajo. Un edificio como el de la calle Santa Fe no nos garantiza la misma seguridad en cuanto a ventilación y distanciamiento social, interno y externo. No es una temporada para jugarla sin estudiarla a conciencia desde lo sanitario. Necesitamos que cada espectador que nos visite tenga la convicción de ingresar a un lugar seguro, machacando en los protocolos, por ellos y nuestros trabajadores y artistas.
-Hablando de los trabajadores, ¿qué pasará con ellos y su continuidad laboral?
-Lo mismo que ya ocurrió este año en la empresa en la ciudad de Buenos Aires: mantuvimos al plantel íntegro. Es nuestra obligación y convicción empresaria desde siempre. En el caso de Mar del Plata tenemos una empresa arraigada en la ciudad, con alrededor de cincuenta trabajadores de la ciudad fijos en relación de dependencia en cada verano que se suman a la acotada nómina de los inviernos. Todo el equipo marplatense (de hecho en nuestra empresa el único “extranjero” de Caba soy yo) tiene sus contratos garantizados. Es posición tomada desde siempre porque la entiendo como obligación moral, incluso en una situación compleja como la que vivimos como empresa. Mientras exista algún activo para desprenderse, el hilo no se debe cortar por los salarios. Además nos permitirá (al tener el doble del plantel para atención del público) la posibilidad de dos equipos “burbuja” por si algún colaborador tuviese que guardarse en cuarentena.
-¿Algún espectáculo para confirmar?
-Al momento sabemos que cumpliremos con “aquel dedo” (nuestra manera de celebrar los compromisos de palabra desde hace ya más de treinta años entre personas de bien de esta profesión) que pusimos en el verano pasado con Mauricio Dayub para el regreso de “El equilibrista”, su galardonado espectáculo, acreedor de todos los premios nacionales, incluyendo la Estrella de Mar de Oro. Su temporada será en el Teatro Mar del Plata. Por el lado de la esquina del América-Atlas, en una sala mantendremos el humor popular con un equipo de cómicos y comediantes más alguna atracción musical. Lo está organizando el productor Darío Arellano y la semana próxima lo definiremos en conjunto. La otra sala será para funciones diferentes, donde se puede llegar a incluir lo marplatense. La idea es tener el próximo fin de semana esa grilla definida con miras a largar la temporada a partir del sábado 26 de diciembre.
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