El 62 por ciento de los marplatenses que participaron en una encuesta admitió que tuvo una reducción de sus ingresos desde que comenzó la pandemia del coronavirus, en un relevamiento realizado por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Mar del Plata, en conjunto con la Red Mar del Plata Entre Todos.

El 28,6% de las familias manifestaron una caída de ingresos superior al 50 por ciento y el 37% admitió que dejó de pagar alguno de sus gastos habituales, siempre de acuerdo a los resultados del estudio sobre la “Situación financiera de los hogares del Partido de General Pueyrredon en contexto COVID-19”.

El relevamiento, realizado entre el 10 y 30 de agosto, reunió 1.857 casos efectivos. La metodología fue online, con un muestreo auto-seleccionado, post-estratificado con cuotas de zonas geográficas, basados en las siete zonas determinadas por el Banco Interamericano de Desarrollo.

Debido a que las respuestas provinieron de una sola persona por hogar, no fue posible calibrar considerando cuotas globales por sexo y edad.

Analizando los cambios en los ingresos familiares de acuerdo al nivel de ocupación del/la jefe de hogar, surge la mayor estabilidad relativa de los empleados del sector público y los jubilados y pensionados.

En contraste, las mayores pérdidas de ingresos corresponden a quienes declaran trabajar en cuenta propia, como técnicos y no profesionales, y a quienes manifiestan ser amas de casa pero que contestan por la situación de su hogar.

Las personas que se describen como desocupadas son proporcionalmente quienes más declaran haber perdido todos sus ingresos, con lo cual cabe preguntarse si son desocupados recientes, debido al contexto.

El 26,2% de los encuestados recibió asistencia del Estado, principalmente a través del IFE, créditos a tasa cero y ATP, siempre de acuerdo al estudio.

Con respecto a los gastos del hogar, el 37% expresó que aumentaron, aunque el 87% está de acuerdo con que se modificó la composición de los mismos. Principalmente, se indicó que se priorizan los gastos “esenciales” y que los alimentos y artículos de limpieza representan una proporción mayor de su presupuesto.

Aquellos que indicaron que dejaron de pagar alguno de sus gastos habituales (el 37%), lo hicieron principalmente con los impuestos, las tasas por servicios y las cuotas de créditos y educación privada.

El 35% indicó que su hogar está más endeudado que al inicio de la pandemia y entre las formas de endeudamiento las más representativas son las contraídas por saldos refinanciados de tarjetas de créditos, los préstamos de amigos y familiares y, en menor medida, préstamos bancarios.

En la mayoría de los casos el nivel de endeudamiento no supera el 30% de los ingresos del hogar, pero el 24% declara que sus deudas representan entre 30% y 50% de sus ingresos y el 11% más que esa proporción.

Casi el 55% ahorraba previo a la situación actual de emergencia. Sin embargo sólo el 35% de las familias que respondieron indica que su nivel de ahorro aumentó o se mantuvo constante.

El director general del proyecto fue el profesor Nicolás González. Los autores del estudio aclararon que, por sus características, no es posible extender los resultados a la población que no participó de la encuesta.