Una casilla que funcionaba como búnker para la venta de droga en el barrio Jardín de Alto Camet fue derribada este miércoles por personal municipal.

El operativo estuvo a cargo de empleados de la Secretaría de Seguridad y del Emsur, y finalizó con dos detenidos y cocaína secuestrada, fraccionada y lista para su comercialización.

En el marco de distintas investigaciones, y por orden de la Fiscalía de Estupefacientes a cargo de Daniela Ledesma y Leandro Favaro, los empleados de la comuna demolieron la casilla en cuestión, que se hallaba ubicada en Los Manzanos, entre Zeballos y Anchorena.

Según informaron fuentes municipales, en el lugar se secuestraron envoltorios de cocaína ya fraccionados para su venta y la aprehensión de dos hombres: uno de ellos fue aprehendido a pocos metros del lugar al intentar darse a la fuga. También se secuestraron elementos de corte y fraccionamiento como tijeras y recortes de nylon, un teléfono celular, material de estiramiento y dinero en efectivo,

En el procedimiento también intervinieron los efectivos de la Delegación de Investigaciones del Trafico Drogas Ilícitas y Crimen Organizado de Mar del Plata, Defensa Civil, y personal de Policía Ecológica que tuvo a cargo de llevar adelante el protocolo Covid-19, como así también los pesquisas contaron con el apoyo de personal del Escuadrón de Infantería, Escuadrón de Caballería y personal de las distintas policías de seguridad de Mar del Plata.

Desde el Emsur pusieron a disposición las maquinarias para derribar el búnker, operatoria supervisada además por el intendente Guillermo Montenegro y el titular de la secretaría de Seguridad, Darío Oroquieta.

Detalles

La investigación fue iniciada hace tres meses y, luego de realizar distintas tareas de campo, se pudo establecer que en este búnker al menos dos personas comercializaban estupefacientes al menudeo, más precisamente cocaína.

Para esto, utilizaban una casilla precaria de pequeñas dimensiones, construida con chapas y maderas la cual, a su vez, se encontraba delimitada por un cerco completamente cerrado con chapas que hacían dificultoso tanto su ingreso como la visión hacia el interior.

El bunker era custodiado por otros sujetos en la parte externa (conocido como “satélites”), quienes se encargaban de advertir anticipadamente cualquier circunstancia que ponga en riesgo su actividad ilícita.

En este contexto, y una vez plasmadas las distintas pruebas obtenidas a través de la investigación, se solicitó a través de la fiscalía la correspondiente orden de allanamiento que fue otorgada por el Juzgado de Garantías N° 4 a cargo del Juan Tapia.

Las personas aprehendidas fueron remitidas y alojadas en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán para ser indagados por los miembros de la Fiscalía, en el marco de una causa caratulada “Tenencia de Estupefacientes con fines de comercialización”.