A pesar del pico de casos durante las últimas semanas, el gobierno de la provincia de Buenos Aires confirmó que Mar del Plata continuará en la fase 4 del aislamiento por lo que no se dará marcha atrás con la apertura de actividades.

Si bien el lunes se dará a conocer el listado en que se encuentra cada uno de los 135 municipios bonaerenses,
la ratificación de la fase en la ciudad trascendió este sábado a la tarde después de que el intendente Guillermo Montenegro mantuviera una charla con el jefe de gabinete, Carlos Bianco.

El jefe comunal y el funcionario clave de la gestión de Axel Kicillof acordaron no modificar la fase en la que se encuentra Mar del Plata luego de analizar la situación sanitaria de la última semana. Un dato fue el que había generado preocupación y la especulación de un posible retroceso a la fase 3: ayer se produjeron 84 casos de coronavirus, récord desde que comenzó la pandemia.

Los argumentos expuestos por la ciudad ante la Provincia para no cambiar de fase estuvieron centrados en nueve puntos. En entre ellos, que Mar del Plata continúa teniendo pocos casos sin nexo epidemiológico y que hubo menos casos positivos en comparación con la semana pasada: 245 contra 248. “Pero si consideramos la fecha de ingreso de la muestra y no la de la carga del resultado pasamos de 277 a 183 esta última semana”, fundamentaron desde el Municipio.

El jefe de gabinete provincial, Carlos Bianco, y el intendente Guillermo Montenegro, en la inauguración del Hospital Modular.

Otro de los puntos por los que se acordó mantener a la ciudad en la fase 4 es que disminuyó muy fuerte la cantidad de casos nuevos cada 100.000 habitantes: de 42 en la semana anterior a 28 de esta última semana. Y no solo eso: además el crecimiento de casos activos fue mucho menor al de la semana anterior (51 contra 102).

Si bien la preocupación estaba dada por la alta cantidad de casos, el Municipio fundamentó que los contagiados de esta semana nuevamente se deben a focos en centros de salud y en geriátricos donde hay muchos pacientes. “Esto, si bien no nos permite mostrar una disminución fuerte en la cantidad de casos semanales, es más fácil de controlar al tratarse de instituciones cerradas”, explicaron fuentes sanitarias.

Además, desde la Municipalidad le explicaron a la Provincia que la suba de infectados durante la última semana también estuvo vinculada por la cantidad de testeos en organismos oficiales y laboratorios privados. “Incluso en aquellas situaciones que no entran dentro de la definición de caso por ser asintomáticos, pero que nos permite controlar los brotes de manera más efectiva. Estamos realizando 18.000 testeos cada millón de habitantes, lo cual supera ampliamente la media nacional de 15.000 cada millón”, detallaron desde la Comuna.

Otro de los puntos clave para pedir que la ciudad se mantenga en fase 4 fue la situación del sistema sanitario: solo hay 31 pacientes COVID internados, 10 en terapia intensiva sin respirador y 5 en terapia intensiva con respirador. El resto está en domicilio o en hoteles