El Alvarado que seguirá a la pandemia de Covid-19 será muy distinto en relación al que terminó jugando el torneo de la Primera Nacional antes del aislamiento social y la interrupción de la actividad. En la semana se confirmó el enroque en el banco de suplentes con la salida de Juan Pablo Pumpido y la contratación de Walter Coyette.

Aunque hay algún movimiento de altas, las bajas las superan claramente. En ese sentido, anoche el presidente Wenceslao Méndez confirmó que dejarán de pertenecer al club dos piezas importantes del equipo que logró el ascenso hace poco más de un año.

El arquero Matías Degrá, gran figura de esa temporada, y el lateral-volante Matías Caro, una rueda de auxilio que cubría varios agujeros, recibieron la comunicación de que no serán tenidos en cuenta para cuando la actividad se reanude.

La lista de jugadores prescindibles se incrementará en las próximas horas dado que los dirigentes empezaron con la ronda de llamados a los futbolistas para anticiparles la decisión.

Por otro lado, hace pocos días el presidente Wenceslao Méndez reveló que es muy difìcil que Maximiliano González, Santiago Giordana, Diego Becker y Germán Rivero, cuatro piezas claves de la última campaña, puedan continuar en el equipo.

La única renovación confirmada es la del defensor zurdo Tomás Mantia, quien se perdió casi todo el 2019 a causa de una lesión en la rodilla.

Y de los jugadores que tenían contrato (Juan Ramón Alsina, Leandro Navarro, Nicolás Andereggen y Brian Visser), los dos primeros acordaron extenderlo seis meses más para que finalicen a fines de 2021.
Por último, aunque no trascendió el nombre, el primer refuerzo del Alvarado que viene será para el arco. “Vamos por un arquero muy importante”, anticipó el presidente, apurado en poner el primer cimiento para el nuevo equipo.