Felicidad en Gesell por la apertura de bares, restaurantes y gimnasios
El ingreso a la Fase 5 posibilitó que la actividad gastronómica y los gimnasios abran sus puertas al público.
Gesell expresaron “alivio y felicidad” por la apertura de bares, restaurantes y gimnasios luego de 21 días sin nuevos casos de coronavirus, lo que permitió el ingreso a la Fase 5 habilitada por una ordenanza municipal.
En tanto, el intendente Gustavo Barrera señaló que “estamos en un momento dónde hay mayor circulación del virus y estamos llegando a un pico de contagio; así que en esta fase no hay que relajarse” y resaltó que trabaja con el área de Turismo “previendo que la pandemia pueda afectar la temporada alta”, el próximo verano.
“Fue un alivio volver a abrir las puertas para que los clientes ingresen a tomar un café pero muchos comerciantes no quisieron hacerlo porque implica un costo ya que tienen que comparar mercadería y no les rinde”, aseguró a Télam Guillermo, dueño de la franquicia de una reconocida cafetería.
Los restaurantes y bares sobre la avenida 3, en pleno centro de la localidad costera ubicada a 430 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, se abrieron el martes cuando el decreto municipal 1363/20 habilitó el servicio de comidas y bebidas para consumo en locales gastronómicos y las actividades culturales (transmisión remota y grabación de shows), lo que colocó a la localidad en la Fase 5 de la cuarentena.
“Se perdió mucha plata por no poder trabajar durante los fines de semana largo”, dijo Guillermo, que sin embargo reconoció que la temporada de verano “fue muy buena. Ahora la gente pedía venir a los bares y cafeterías”.
De acuerdo al protocolo vigente, los locales deben tener una alfombra sanitizante, alcohol en gel, alcohol rebajado en agua y los clientes tienen que mantener una distancia de un metro y medio, además de no poder superar las cuatro personas por mesa.
Yamila, encargada de un bar céntrico, contó a Télam que tuvo que remodelar la cocina para contar con más espacio y eso la obligó a reacondicionar el salón. “Abrimos en enero y tuvimos que volver a acomodarnos. Por suerte cuando se permitió el “take away” vendimos bastante, más que ahora”, sostuvo y agregó: “Queríamos volver a trabajar y fue un alivio hacerlo”.
La mujer expresó que por el día del padre que se festeja mañana sumó a su servicio la venta de picadas y desayunos “con la finalidad de tener otro ingreso”.
Por su parte, Titi, Miguel y Dani, tres amigos que comparten hace 45 años una mesa en la tradicional confitería “Cachavacha” aseguraron que estaban “contando los minutos” para volver a compartir un café.
“Desde marzo que contamos los días, horas y minutos para volver al bar. Nunca dejamos de venir, nos acercábamos a llevarnos nuestro café”, expresó Titi.
Por su parte, Jorge y Rodi aseguraron que para ellos reunirse en un bar “es motivo de encuentro” y que ambos “no aguantaban más” en sus casas. “Somos amantes de las reuniones, es nuestro folclore”, reconoció Rodi, de 91 años.
Esta nueva fase, la última según la Resolución Provincial que regula las actividades y servicios habilitados en el marco del aislamiento y distanciamiento social, preventivo y obligatorio, establece que los negocios pueden permanecer abiertos hasta las 20 horas. En cambio, los bares y restaurantes están autorizados a mantener abiertas sus puertas los viernes y sábados hasta las 00 horas.
Con el ingreso a la nueva fase también se permitieron las actividades deportivas al aire libre, las recreativas con distanciamiento social y encuentros sociales de hasta 10 personas con distanciamiento físico.
Valeria, encargada del gimnasio “Centro Gym”, explicó a Télam el protocolo que deben cumplir los clientes que quieran entrenar en su establecimiento.
“Reservamos por turnos de 45 minutos. Cada persona tiene que traer su toalla, su alcohol en gel y tienen que entrenar si o si con barbijo. No podemos usar las cintas para correr, las bicicletas fijas y elípticos y cada vez que finaliza un turno se limpian todos los elementos que se utilizaron”, remarcó.
Agustina, una de las personas que entrena en el gimnasio, dijo que “tenía muchas ganas” de volver a hacerlo y que durante los meses que permaneció cerrado realizó actividad física en su casa.
Villa Gesell se sumó esta semana a una extensa lista de municipios que ingresaron a la Fase 5 tras cumplir 21 días sin nuevos contagios de coronavirus.
Gustavo Barrera, intendente de Villa Gesell, afirmó que “todavía no se ha ganado nada” y aseguró que “estamos trabajando con la Secretaría de Turismo previendo que la pandemia pueda afectar la temporada alta” que llegará el próximo verano.
“El ingreso en la Fase 5 nos permite de alguna manera habilitar rubros que hasta ahora no estaban funcionando. Tenemos que tener en cuenta que estamos en un momento dónde hay mayor circulación del virus y estamos llegando a un pico de contagio; así que en esta fase no hay que relajarse”, expresó.
Barrera explicó que implementó el primer “Sello de Calidad Sanitaria” para los rubros gastronómico, hotelero y de balneario para cuando se reanude la actividad turística en el futuro, determinando los protocolos, directrices e incluso capacitaciones.