Cuando Ken Kuwada viajó a Estados Unidos a mediados de febrero para potenciar su entrenamiento el coronavirus todavía no había entrado en escena en América con la fuerza que lo hizo semanas más tarde.

La agenda del marplatense proyectaba realizar en Rhode Island un entrenamiento de varias semanas, viajar a Europa para competir durante abril y mayo en varios torneos que le permitirían un mayor roce en Italia, Alemania y Holanda y luego volver a su base de operaciones en el noreste de Estados Unidos para tomar parte de otras competencias.

La vuelta a Mar del Plata estaba programada para junio. Pero en los últimos días, Ken -quien consiguió un título mundial en la rama masculina para esta ciudad luego de 37 años-, recibió la noticia de que su vuelo había sido cancelado.

No obstante, con la serenidad que caracteriza al pueblo de sus ancestros japoneses, Ken no desesperó.

“No tiene sentido desesperarse o ponerse mal. Solo tengo que conseguir una extensión del permiso de trabajo acá. Pero por lo demás, estoy viviendo en la casa de mi sponsor así que prácticamente no tengo gastos. Sino sería un problema como el que está sufriendo otra gente, que está varada y la pasa mal”, admite Kuwada en diálogo telefónico con LA CAPITAL.

“Hace dos años que vengo a Estados Unidos a entrenar y competir en algunos torneos que se hacen en septiembre. Este año me había venido antes porque tenía pensado correr durante abril y mayo en Europa pero obviamente todo ese se canceló”, contó el marplatense que el 12 de septiembre de 2016 se consagró campeón mundial en los 10.000 metros combinados en Nanjing, China.

El mundial que estaba programado para julio en Colombia ya fue pospuesto en primera instancia para septiembre. Aunque nadie es demasiado optimista con respecto a la realización este año.

Sin embargo, si bien Ken fue el último campeón mundial que dio la ciudad en patín carrera, su relación con la Selección Argentina registra algunos sinsabores.

“Para correr en la Selección tenés que estar en los Nacionales que son clasificatorios. Pero la verdad que estando en Estados Unidos tengo que ver qué es lo que quiero y qué me conviene”, confiesa sobre sus planes futuros con el seleccionado, quien además fue medalla de oro en los Juegos Mundiales de 2017 en Breslavia, Polonia.

“En Argentina las cosas están complicadas. El manejo de la Selección dejó mucho que desear. En la Selección no se trabaja como se debería hacer. El problema empieza desde la dirigencia y bueno, ellos son los que ponen al cuerpo técnico. Ahora cambiaron de entrenador pero no lo conozco tanto más allá de un par de llamados telefónicos que tuvimos”, afirma con crudeza sobre la realidad del patín nacional.

“Las puertas no están cerradas para la Selección. Pero siempre depende del nivel que uno tenga. Y para correr un mundial tengo que hacerlo bien. Es mi forma de ver. En los últimos años no me estaba yendo bien y por eso aposté por venir a entrenar a otro lugar para trabajar como a mi me gusta. Acá tengo todo lo que necesito”, se sinceró.

El no hacer podios en los últimos torneos (fue cuarto en los Panamericanos y séptimo en el Mundial) hicieron que en abril le sacaran la beca de la Secretaría de Deportes de la Nación.

Hoy Kuwada cuenta de todos modos con el apoyo del Emder y el Enard, aunque -claro está- el poder dedicarse de lleno al patín carrera como estaba haciendo este año tiene que ver fundamentalmente con la importante ayuda que recibe de su sponsor, una empresa dedicada a productos vinculados al patín.

“Los materiales que usamos son caros. Un juego de ruedas sale 180 dólares y yo estoy usando uno o dos por mes. Eso es imposible estando en Argentina. Por suerte mi sponsor me da una mano muy grande en ese sentido”, reconoce.

El coronaviurs, sin embargo, generó una pausa en el desarrollo del exigente entrenamiento que Ken intenta llevar adelante en su carrera.

“En las últimas semanas apenas pude salir a patinar cuatro veces. Acá cerraron parques y pistas así que entrené en la calle. Pero decidí no hacerlo tanto porque la gente no toma todos los recaudos. Andan sin barbijo, no se respeta la distancia… Por eso preferí cuidarme y entrenar adentro ya no tanto con los patines. Trabajo en una plataforma virtual de ciclismo y hago otros ejercicios complementarios centrados más en lo físico. Igual no me preocupa tanto eso porque ya habrá tiempo para entrenar bien cuando todo esto acabe. No creo que en este año haya competencias importantes para mi ya”, reconoció quien en 2016 recibió el Lobo de Mar de Oro, el máximo premio al deporte marplatense que entrega anualmente el Círculo de Periodistas Deportivos de Mar del Plata.

Kuwada, que se inició en San José y luego representó también a General Mitre y Once Unidos, no pierde la calma pese a estar lejos de los suyos en plena pandemia. Tiene claro lo que quiere para su carrera. Y hoy por hoy no tan claro si quiere seguir representando a un seleccionado que no se maneja como él pretende.