No será fácil ni gratuita la definición que adopte el Presidente de la Nación en las próximas horas con respecto a la continuidad o la flexibilización de la cuarentena por el coronavirus. De esa decisión depende gran parte del futuro de miles de argentinos, ya sea desde el punto de vista sanitario o desde el económico. Tiempos inéditos, de tomas de posiciones que generan consecuencias inmediatas. “De una mala economía se vuelve, de una muerte no”, pregonan quienes desde lo más alto del poder se inclinan por seguir apostando al aislamiento de la población para evitar que se disparen los casos de infectados. “Si no se permite que lentamente se reanuden actividades en pymes, comercios e industrias las consecuencias económicas serán terroríficas”, advierten por su parte quienes constatan cómo se desmorona el andamiaje financiero en sus respectivas actividades. Mar del Plata, claro está, no permanece ajena a esta coyuntura.

En lo estrictamente relacionado con lo sanitario, en la ciudad hasta el momento los resultados son más que aceptables. Al cierre de estas líneas se registraban oficialmente 9 casos de personas infectadas con coronavirus. “En realidad -refirió una altísima fuente sanitaria local- Mar del Plata lleva hasta hoy 14 casos, 9 activos, 3 recuperados y dos fallecidos. En la media, en la proyección, muchos pensábamos que hoy estaríamos en 31 casos. Llevamos tres días consecutivos con cifras alentadoras pero sabemos que esto es hora por hora, que se te explota y dispara en cualquier momentos. Pero por ahora vamos bien”, confesó. “Salvo el caos de los bancos del viernes pasado, cuando retrocedimos varios casilleros en la cuarentena, Mar del Plata está dando señales de mucha madurez. Es difícil pero no queda otra camino teniendo en cuenta que el porcentaje de población de riesgo en esta ciudad es altísimo”, graficaron cerca del intendente, quien insiste en que el relajamiento ante las medidas de aislamiento constituye el verdadero peligro en esta lucha. Preocupó el panorama que se vio este martes en las calles de la ciudad, cuando se generó un movimiento mucho más intenso que en días anteriores.

En tanto, un trabajo presentado por el Comité de Contingencia Sanitaria de la Escuela Superior de Medicina de la Universidad Nacional de Mar del Plata prevé 1.600 casos de coronavirus para fines de mayo en Mar del Plata. Según se señaló, la curva de contagio estimada para el inicio del invierno en la ciudad “es con un escenario que no es el peor posible, sino uno más cercano a una base que a un intermedio”, apuntado que “la mayoría de las personas infectadas tendrá un curso leve de la enfermedad o incluso muchos serán asintomáticos (eso equivale a 1280 pacientes, el 80% del total)”. El informe detalla que “las 320 personas restantes, que representan el 20 % del total de casos, saldrán las que requieran algún tipo de seguimiento del sistema de salud y posible internación con la consiguiente necesidad de camas”, agregaron, al tiempo que destacaron que “se calcula que serán necesarias unas 200 a 240 camas, de cuidado general, baja complejidad, (representado hasta un 14% de los infectados) al 31 de mayo”.

En cuanto a aquellos pacientes con panoramas más graves, desde la Escuela Superior de Medicina estiman que representarán “un 4%, es decir unos 40 pacientes que tendrán la necesidad de cuidados de Unidad de Terapia Intensiva (UTI), lo que implican 40 camas libres para coronavirus”. Según indicaron a LA CAPITAL, el informe fue realizado con la mirada puesta en el comportamiento que ha tenido hasta la fecha el virus en los otros países y continentes, pero que en el caso de Argentina, por las medidas preventivas implementadas, se hizo “un poco diferente y difícil realizar proyecciones demasiado largas, con lo que se ha decidido presentarlas hasta el 31 de mayo”.

Las autoridades municipales, además de intentar ser lo más efectivas posibles en el cuidado de la salud de la población, saben que deberán afrontar una más que delicada situación desde lo económico, panorama que se replica en cada una de las intendencias de la Argentina. La recaudación en estas horas cae a niveles inéditos, con lo cual sin el socorro financiero de Provincia y Nación será prácticamente imposible cumplir al menos con las obligaciones indispensables. Con fondos que en todos los estamentos se están redigiriendo exclusivamente al sistema sanitario y al de la ayuda social, la economía municipal aparecerá más que endeble para poder hacer frente a los compromisos de otras áreas. “El comerciante que hoy no puede abrir, el industrial o empresario que tiene que pagar millones de pesos en sueldos y hoy no está percibiendo un centavo y miles de personas a lo largo y a lo ancho del distrito con dificultades financieras, lo primero que dejan de pagar son las tasas municipales. El panorama no es el mejor, claro está, por lo que mucho habrá que trabajar en este sentido”, señaló con preocupación uno de los secretarios del gabinete. “La gente lo único que paga en estos días es el cable y Netflix y porque lo tiene incorporado en el débito automático”, añadió.

En este sentido, el intendente Montenegro viene manteniendo reuniones con los principales representantes de la oposición y de los bloques del Concejo Deliberante, intentando establecer un programa de prioridades en lo que atañe a gastos e inversiones, poniéndolos al tanto de la situación económica y financiera de la comuna -la coparticipación provincial cayó más de un 20 por ciento en marzo- y lo que marcan las proyecciones para los próximos meses. En estas horas, la salud y la asistencia a los sectores sociales más vulnerables se encuentran al tope de las prioridades, coinciden en destacar. Los últimos datos sobre pobreza e indigencia en Mar del Plata avalan esa política. Según el Indec, en la ciudad hay más de 160 mil pobres y 42 mil indigentes. La pobreza abarca al 25 por ciento de la población, con un escenario de desempleo que orilla el 12 por ciento. La demanda de alimentos desde las zonas periféricas crece a diario siendo la tarea de contención una de las claves de estas horas.

El lunes, en encuentro con los presidentes de los distintos bloques, el intendente Guillermo Montenegro anunció que elevaría una ordenanza solicitando la prórroga de la Tasa de Servicios Urbanos (TSU) para marplatenses hasta el 11 de mayo, al igual que para OSSE y para la Tasa por Inspección de Seguridad e Higiene (en este caso para la última categoría, con facturación anual menor a 15 millones de pesos). Además, desde el Ejecutivo solicitarán que el Concejo autorice la utilización de los fondos municipales afectados para hacer frente a la emergencia. La decisión por parte del gobierno municipal se hizo pública horas después de que los concejales del Frente de Todos solicitaran al Ejecutivo el control de precios y la postergación de plazos y vencimiento de las tasas.

En tal sentido, signos de madurez y responsabilidad demuestra en estas horas la clase política marplatense. “Es con todos. Es con todos”, insiste el intendente ante sus interlocutores. El intercambio de ideas, el apoyo a las medidas urgentes y el trabajo codo a codo de oficialismo y oposición hoy es una realidad en la ciudad. “No es tiempo de chicanas, de peleas o de intereses chiquitos. Tenemos que salir de esta entre todos”, resaltan desde el Frente de Todos, AM y otras fuerzas políticas. “Estamos para dar una mano y tirar para adelante”, añaden. Al menos en Mar del Plata la “grieta” hoy se esfuma. “Si pensamos que podemos encarar y solucionar esto solos seríamos directamente unos delirantes”, sostienen desde el despacho del intendente donde en la noche del lunes se multiplicaron las sonrisas cuando en un reportaje televisivo, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, elogió “la colaboración y la ayuda” del intendente Guillermo Montenegro en la lucha contra el coronavirus. Las declaraciones las formuló en una entrevista realizada con el periodista Joaquín Morales Solá, donde diferenció la predisposición de los intendentes bonaerenses y gobernadores de otro sector de la oposición que no tiene responsabilidades ejecutivas.

“Es difícil generalizar”, dijo el Presidente sobre la oposición. Y lo fundamentó: “Con muchos gobernadores y los intendentes del Gran Buenos Aires, en realidad diría de todo Buenos Aires porque incluyo a Montenegro, lo único que he recibido es colaboración y ayuda y sumarse a un trabajo en conjunto. En esto también incluyó al jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. Nosotros sabemos lo que está pasando: una cosa es gobernar y otra tirar piedras”. En ese sentido, el Presidente afirmó que “hay otra oposición que llena las redes sociales, mentiras, insultos y que tratan de levantar en un momento en que todos tendríamos que estar unidos”. Y los diferenció de “la otra oposición”: “Los que están en las intendencias trabajan codo a codo con nosotros para tratar de resolver el problema de los argentinos. Y eso no son sólo los oficialistas sino también los opositores. Eso es lo que veo en Montenegro, en Grindetti y en Valenzuela”, puntualizó.

En el más absoluto anonimato, más de 200 empresarios de la ciudad coincidieron en agruparse en una red solidaria. Así, comenzaron a realizar aportes económicos y donaciones que se traducen en centenares de bolsones diarios de alimentos que son girados a la Municipalidad para que esta los distribuya en barrios y comedores a través de Desarrollo Social. “Sólo buscamos llevar algo de tranquilidad a las familias carenciadas. Hoy la solidaridad debe florecer más que nunca”, refirió uno de los empresarios que participa en esta red. Todo el dinero recolectado, se estableció, es destinado a la compra al por mayor de productos seleccionados, que luego es acondicionado en forma de combos familiares para finalmente ser entregados a la Municipalidad que, a través de sus recursos e información de las necesidades, decidirá y ejecutará la entrega a las familias. Por último se explicó que quienes estén en condiciones de colaborar podrán llamar al teléfono 2235247527.

Tras una buena temporada de verano, el “tsunami” del coronavirus, quién puede dudarlo, dejará graves consecuencias en lo económico. “Hasta que nos recuperemos de esto van a pasar varios meses”, vaticinan en el equipo de Economía de la comuna. Y volvieron a encenderse las luces de alerta, en el ámbito municipal, cuando se conoció, el fin de semana, la decisión de la Universidad de Buenos Aires (UBA), de comenzar el ciclo lectivo 2020 el 1 de junio próximo y extender el dictado de clases hasta el 12 de marzo de 2021, estableciéndose así una continuidad que apenas tendrá un breve receso para las fiestas de fin de año. “Si el cronograma de la UBA se convierte en referencia para el resto de las universidades y de los distintos niveles de educación nos quedamos sin temporada de verano”, coincidieron en advertir tanto funcionarios del Emtur como empresarios ligados al sector turístico.

“Si a las autoridades de Educación se les ocurriera que las clases en primaria o secundaria pueden imitar ese esquema será el tiro final para nosotros. No habría temporada de verano con el desastre que eso implicaría. Tenemos que estar atentos y trabajar en conjunto para que no haya sorpresas en el medio de esta locura que estamos viviendo”, señalaba con preocupación el representante de una de las cámaras más importantes relacionadas con el turismo. Como hecho alentador, en tanto, se conoció la decisión de la Universidad Nacional de Mar del Plata que apuesta a lo virtual y anunció que no reprogramará el ciclo lectivo, desmarcándose de lo decidido por la UBA. “No sabemos cuando se reiniciarán las clases”, refirió por su parte el ministro de Educación, Nicolas Trotta.

Días atrás, la Liga de Consumidores y Usuarios de Mar del Plata informó que había recibido numerosas denuncias sobre abusos de precios en comercios de Mar del Plata, en productos de primera necesidad. “Hay quienes toman la crisis como una oportunidad de negocios”, se consignó. Una situación que se reiteró a lo largo y a lo ancho del país. Por eso, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, decidió firmar un decreto de necesidad y urgencia que modifica la ley de Defensa a la Competencia, y faculta a los intendentes a aplicar sanciones ante aumentos no justificados de precios. Cuando aún no se conocía la letra chica del DNU, desde la comuna local se indicaba que de nada servirá esta iniciativa si quedan exentos del contralor municipal las grandes firmas que son formadoras de precios. “Una cosa es ir a controlar si el almacén del barrio aumentó la yerba o la lavandina y otra muy distinta es constatar en el mayorista o distribuidor si se cumplen los precios de referencia”, se añadió.

La compra de alimentos por casi 400 millones de pesos a precios superiores a los de referencia le sumó al gobierno de Alberto Fernández la tercera polémica en cinco días, en plena discusión interna del modelo de salida de la cuarentena total. La noticia conocida el lunes sobre que el Ministerio de Desarrollo Social pagó $384 millones en alimentos a precios que en varios casos están por encima de los valores testigos fijados por la Sindicatura de la Nación, volvió a sacudir los ánimos en la Quinta de Olivos, donde por estas horas el Presidente se encuentra en pleno diseño del plan de aislamiento selectivo que se aplicará desde el 13 de abril. “Les piden a los intendentes que controlen los precios pero terminan comprando mercadería más cara que los topes que ellos mismo estipulan. Algo no está funcionando muy bien”, se quejó un concejal del oficialismo.

A todo esto, las ventas en los comercios de Mar del Plata se derrumbaron un 51,55% durante marzo, si se lo compara con el mismo periodo del 2019. En cambio, si la equivalencia es con febrero el desplome fue del 55,27%. Tales datos surgen de un relevamiento realizado por el Departamento de Estudios Sociales y Económicos (DESE) de la Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP) de Mar del Plata realizó que incluyó solamente a comercios que debieron cerrar sus puertas el 20 de marzo por el decreto establecido por el Gobierno Nacional. Entre los rubros que participaron del informe se encuentra bazar y regalos, bijouterie, calzado y marroquinería, ropa y artículos deportivos y de recreación, joyería y relojerías, jugueterías y artículos de librería, mueblerías y decoración para el hogar, textil blanco e indumentaria, entre otros.

Según el presidente de la UCIP, Raúl Lamacchia, “entre los puntos más destacados que presenta el estudio se encuentra que la mayor preocupación para los comerciantes en estos días se centra en la dificultad que tienen para el pago de sueldos, alquileres e impuestos”. Además agregó: “El cierre de los locales provocó un freno en la actividad comercial que venía dejando en los últimos meses porcentajes positivos y de crecimiento”. Frente a la pregunta si ante el aislamiento por el Covid-19 ha implementado la modalidad teletrabajo o home office entre sus empleados el 79,4% manifestó que no; el 14,7% dijo que sí están utilizando esa forma de trabajo; y el restante 5,9% expresó que por ahora no, pero piensa incorporar la metodología en breve. Lamacchia destacó que “el sector se encuentra atravesando un momento de mucha angustia y preocupación debido a que no se conoce cuánto durará la lucha contra el virus, pero además sí sabemos que luego de esta situación será muy difícil y lento el proceso que llevará a que las economías puedan volver a su ciclo normal de actividad”.

Horas de estrés y de angustia. La directora general de Salud Mental del municipio, Stephanie Schon, sostuvo en una entrevista publicada el domingo por LA CAPITAL que la situación que se vive “genera un estrés altísimo” por lo que habrá muchos casos postraumáticos. “El estrés –dijo- genera mecanismos adaptativos que se manifiestan con ansiedad, angustia, con tristeza, irritabilidad y con miedo”. Asimismo, observaba que “es terrible” lo que está sucediendo con los psiquiatras. “Estamos bastante limitados para atender con esta cuestión del aislamiento. Van a aumentar mucho las consultas y ya hablaría del trastorno postraumático”. Para afrontar el pedido de aislamiento, la profesional destacó la importancia de no perder las rutinas dentro de la casa. Cabe apuntar que según el Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos, en los últimos 30 días se incrementó el consumo de psicofármacos, especialmente tranquilizantes y ansiolíticos.

Los marplatenses calificaron con una nota promedio de 6,35 a su propio estado de ánimo dentro de una escala de 1 al 10, según una encuesta realizada por el Observatorio de la Ciudad de la Universidad FASTA, con el objetivo de conocer de qué manera las medidas de aislamiento social implementadas para contener la propagación del Covid-2019 impactan en la vida cotidiana de los habitantes de Mar del Plata. La encuesta, basada en las respuestas de 531 personas mayores de 18 años, también describe otros aspectos de la vida de los marplatenses en cuarentena como, por ejemplo, qué clase de problemas sufrieron dentro del hogar. Entre ellos, los más mencionados fueron: haber tenido muchas o bastantes dificultades para trabajar (47,5%), mucho o bastante estrés y/o nervios (42%), mucho o bastante aburrimiento (39,7%), mucha o bastante falta de apetito o exceso en las comidas (31,3%) y mucho o bastante cansancio y/o falta de energía (23,2%).

Los encuestados también describieron a qué actividades les dedicaron mayor cantidad de tiempo dentro de sus viviendas desde que se establecieron las medidas de aislamiento social. La más mencionada, con una frecuencia del 69,3%, resultó ordenar y/o limpiar la casa, seguida por usar internet y redes sociales (58%), cocinar (44,63%) y ver televisión (39,9%), entre otras tales como dormir, escuchar música o compartir en familia. En otro orden, se estableció que para el 61,21% de los consultados la crisis del Covid-19 tendrá un impacto negativo y duradero en la economía mundial, cifra que se eleva a un 74,76% cuando se considera el efecto en la economía nacional. Al ser consultados sobre el impacto en la economía de sus hogares, si bien el 88,88% de los encuestados señaló que será negativo, sólo un 35,40% del total afirmó que será duradero, contra un 53,48% que opinó que será pasajero.

Miles de argentinos consultan en estas horas, en la página web de la Anses, el estado del trámite en relación a la solicitud de la ayuda especial por diez mil pesos del Ingreso Familiar de Emergencia lanzado por el Gobierno nacional. Una altísima fuente reconoció a LA CAPITAL que fueron más de 14 millones las personas que se anotaron, y que en realidad el beneficio le correspondería a sólo a 4,5 millones de ellos. “Ahora se está depurando la base de datos. En un primer barrido ya se detectó que se preinscribieron personas que tienen ingresos o patrimonios como autos o inmuebles, que superan el requisito de estar en una situación de vulnerabilidad social. Otros miles quedarán sin calificar porque el pago se hará a un solo integrante por familia aunque lo hayan solicitado los dos cónyuges o convivientes”, se indicó. Por último, la fuente adelantó que los bancos comenzarían a pagar ese beneficio seguramente desde el 15 de abril próximo.

Desde Acción Marplatense se viene solicitando con insistencia que sea obligatorio el uso de barbijos en ámbitos públicos, como ya lo instrumentaron varios países, cinco provincias argentinas -Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja, Misiones y Jujuy- en las últimas horas el municipio de Zárate. “No perdamos más tiempo. El barbijo sirve. Es otra barrera para que el virus no pase”, escribió el ex intendente Gustavo Pulti en sus redes sociales. “El uso de barbijos debería ser obligatorio en todo el distrito”, señalaron por su parte los concejales Paula Mantero y Horacio Taccone. “Hay un espectro en la enfermedad por Covid-19 que hace que personas que están asintomáticas o con muy escasos síntomas puedan estar circulando sin saber que ellas padecen coronavirus y que por ende pueden estar dispersando el virus con sus secreciones, contaminando a personas y superficies u objetos”, escribió por su parte, en un artículo publicado por LA CAPITAL días atrás el ex secretario de Salud de la comuna, Alejandro Ferro.

Cortitas y al pie. Una muy buena. En plena pandemia se realizó en la Clínica Pueyrredon de Mar del Plata el primer trasplante del país. “A pesar de los temores todos cumplimos con nuestro deber y estamos muy felices por eso”, reconoció el cirujano Diego Fernández. // Marplatenses en lucha contra la pandemia. Probarán un tratamiento simple para reducir la mortalidad del coronavirus. Dos médicos marplatenses –Pablo y Gonzalo Corral- forman parte del estudio, consistente en la aplicación de un fármaco de fácil acceso que puede reducir el índice de mortalidad. “Frenar esa cascada inflamatoria con esta medicación que es conocida y que está universalmente disponible y que es barata, sería una gran respuesta que le podemos dar a esta enfermedad que está afectando a todo el mundo”, afirmaron. // Fe. Todo un mensaje en la cuarentena. El personal de seguridad del Sheraton de Mar del Plata, durante las últimas noches decidió encender las luces de algunas habitaciones, con lo que se conformaba el dibujo de la palabra Fe que podía verse desde la costa marplatense.