Mar del Plata vive su segundo día de cuarentena obligatoria con una quietud en las calles incluso mayor a la del primer día de aislamiento dispuesto para frenar la propagación del coronavirus. En el marco de un sábado por demás atípico en la ciudad, el tránsito y la actividad es por demás escasa. Continúan los patrullajes de las fuerzas de seguridad -a pie y en móviles policiales que proyectan por altavoz el mensaje “Quedate en casa”– y el operativo de control en los accesos a Mar del Plata.

Para este sábado el Servicio Meteorológico Nacional pronosticó una temperatura máxima de 27 grados en Mar del Plata. Sin embargo, para la mayor parte de la población local lo que ocurra con el tiempo resultará indiferente, o no.

Este sábado las calles volvieron a amanecer desoladas; los negocios más esenciales (farmacias, almacenes, supermercados, panaderías carnicerías, granjas, verdulerías y kioscos, entre otros) permanecen abiertos y el resto son persianas bajas y familias que viven de manera particular su segundo día dentro del domicilio bajo las condiciones establecidas en el aislamiento preventivo, social y obligatorio decretado por el Gobierno nacional.

Puertas adentro, la realidad de cada marplatense se modificó en las últimas 48 horas. El tiempo se emplea diferente y la rutina, al menos para muchos, ya no es la misma; una particularidad del virus que ya dejó huella y marca, sin dudas, un antes y un después en la vida de la mayoría. 

Afuera, la circulación de vehículos es por demás escasa, algunas zonas menos que en otras. La frecuencia de los colectivos (solo algunos choferes utilizan guantes y barbijos como habían anunciado) es la de un día domingo, aunque en varias paradas se agolparon esta mañana pasajeros esperando la llegada de las distintas unidades y algunos advirtieron demoras.

Es que si bien la actividad se ve fuertemente reducida en la ciudad y el país, existe un amplio número de vecinos que continúa asistiendo a sus lugares de trabajo -en gran parte con barbijos y guantes de látex-. De hecho, en las últimas horas el gobierno amplió la nómina de excepciones a la cuarentena total.

El aislamiento que entró en vigencia a la hora cero viernes mantiene una postal inédita de la ciudad con calles y avenidas alejadas de su ritmo habitual.

Al igual que durante el viernes (primer día de cuarentena), el reducido movimiento que se advierte en la vía pública es el de personas que continúan concurriendo a lugares de trabajo o salen a abastecerse de alimentos, sacan a sus mascotas o realizan filas en farmacias, almacenes y sucursales bancarias para realizar operaciones a través de los cajeros automáticos, respetando la distancia correspondiente.

Móviles de la Policía Bonaerense y la Policía Federal siguen recorriendo la ciudad y utilizan altavoces para proyectar el mismo mensaje: “Hasta el 31 de marzo quedate en casa con tu familia, cumplir la cuarentena aleja el coronavirus y evita la pandemia”.

Ayer, al igual que en los días previos a que la cuarentena pasara de ser una recomendación sanitaria a una medida obligatoria, siguieron registrándose infractores: vecinos que pese a las restricciones y al reciente decreto presidencial no respetan la cuarentena y con total imprudencia salen a caminar, a pasear o trotar por la costa o incluso -en varios casos- a mirar las pocas vidrieras de negocios que continúan abiertos en los principales paseos comerciales.

Algunos de estos vecinos fueron escrachados por otras personas a través de las redes sociales; se registraron varias denuncias y además, hubo detenciones concretadas por personal de las fuerzas de seguridad.

¿Cómo denunciar?

Para denunciar infracciones a la cuarentena obligatoria se encuentran habilitadas la líneas 107 y 134. El Municipio dispuso además la posibilidad de efectuar denuncias online a través del sitio www.mardelplata.gob.ar/mesadigitalcovid. Las denuncias tendrán carácter de declaración jurada.