Ante la alarma generalizada por el avance del coronavirus y el endurecimiento de las medidas para evitar su propagación, varios supermercados y mayoristas de la ciudad se vieron colapsados a raíz de un fuerte incremento de la demanda para comprar alimentos y otros productos en cantidad.

En este sentido, las góndolas con fideos y arroz fueron arrasadas en algunos hipermercados de la ciudad, a la par de las que exhiben los desinfectantes y el alcohol en gel, en falta en varios establecimientos comerciales.

En el hipermercado Carrefour, de Constitución y Monseñor Zabala, ayer, las marcas más económicas de estos productos -como así también las incluidas dentro del programa de Precios Cuidados- registraron una elevada demanda que llevaron a que directamente no haya arroz y falten fideos y algunas salsas de tomate. “Si no hay en la góndola, no quedó”, comentó un repositor.

Mientras que la oferta de la amplia mayoría de los comestibles es normal hasta el momento, aunque con sobreprecios en algunos casos, clientes que buscan abastecerse de estos productos básicos no encuentran stock al concurrir a algunos supermercados.

El faltante de arroz hasta el momento no alcanza a los mayoristas ni tampoco a todos los supermercados, aunque en algunas sucursales las góndolas vacías y revueltas evidencian la escasez de estos alimentos en ciertos locales.

“La gente está llevando muchos paquetes de arroz y fideos y no se llega a reponer. No hay límite de compra para estos artículos”, informó un repositor de Disco.

Asimismo, sin registrarse faltantes, en hipermercados y mayoristas el público arrasó con el papel higiénico, los paquetes de servilletas y los packs de rollos de cocina, reduciendo la oferta de marcas disponibles.

“Vemos que la gente está comprando una gran cantidad de papel higiénico, algo que entendemos tiene que ver con abastecerse en forma preventiva, aunque de manera desmedida“, informó un empleado de Carrefour y garantizó, por el momento, el abastecimiento de este tipo de artículos.

En varios supermercados se limitó el ingreso de clientes. Algunos no permiten que entren al mismo tiempo más de 50, 100 o 300 personas, de acuerdo a la superficie del establecimiento comercial, una medida similar a la que adoptaron varios comercios y farmacias para evitar la concentración de gente y contribuir a evitar la propagación del virus.

“En esta sucursal nos ordenaron que no ingresen más de 300 clientes, así que se espera a que la gente salga para dejar entrar a otros”, agregaron desde el hipermercado Carrefour de la avenida Constitución, junto a una extensa fila de vehículos que aguardaba para ingresar al estacionamiento.

En tanto, informaron que se reforzaron las tareas para desinfectar los changos de compra frente al incremento de público en los súper e hipermercados.

En las sucursales de Toledo, en tanto, se observan desde hace 48 horas filas de personas que deben esperar en la vereda para poder ingresar. La misma medida adoptaron los mayoristas Hergo, Maxiconsumo, Makro y Yaguar, entre otros.