El presidente Alberto Fernández aseguró hoy que vino a darle su palabra “el valor del compromiso”, para contar a la ciudadanía “el lugar en el que estamos parados como sociedad, cuáles son los riesgos que nos acechan, cuáles son las fortalezas”, y “cuál es el camino para ponernos en el rumbo del crecimiento con justicia social”, al inaugurar el 138 período de sesiones ordinarias de la Asamblea Legislativa.

Fernández afirmó que quiere que “la palabra recupere el valor que alguna vez tuvo entre nosotros” y dijo que gobernar “no es mentir ni ocultar la verdad al pueblo”.

“Como lo hice el día que asumí, vengo a ratificar con mi presencia el rumbo”, sostuvo en los primeros minutos de su discurso, en los que hizo un repaso por las primeras medidas de su gobierno. Destacó que en este sentido que comenzó “por los últimos para llegar a todos”.

El Presidente destacó la “oportuna sanción” de ley de solidaridad social y reactivación productiva y la consideró un “punto de arranque muy importante” para los primeros 81 días de gestión de su gobierno.

Seguido, se metió de lleno en el aspecto económico. “Los picaros que especulan subiendo los precios no tienen cabida en esta Argentina”, dijo.

“Esta es la hora de definir de qué lado vamos a estar cada uno; nosotros vamos a estar del lado del pueblo“, agregó y en relación a la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), dijo que se encuentra abierto un canal de diálogo y que su gobierno busca “una salida ordenada” mediante “un acuerdo que permite a la Argentina salir adelante y ponerse de pie; eso es innegociable”.

Enseguida, reafirmó: “No vamos a pagar la deuda a costas del hambre y los sueños de los argentinos”. Y defendió la independencia “económica e intelectual” del país.

En otro orden, Fernández anunció que enviará al Congreso la reforma de la Justicia Federal y que, por otro lado, ordenará a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) desclacificar documentos secretos sobre el atentado a la AMIA

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