El ex jefe de la policía Departamental, removido de su cargo hace 10 días luego de que se conociera un video en el que golpeaba a un hombre acusado de haber robado unos celulares, quedó imputado por “apremios ilegales”.

La fiscal Lorena Hirigoyen consideró que hay pruebas suficientes para adjudicarle el delito como autor de “apremios ilegales” al comisario mayor Christian Marcozzi, quien podría ser citado a declarar en los próximos días. Además de Marcozzi, otros dos policías también quedaron imputados, aunque uno como “partícipe necesario”.

Marcozzi y los otros dos policías se encuentran en libertad, ya que la pena por el delito que se les acusa es excarcelable y, para la fiscal, no existe peligro de fuga ni de entorpecimiento procesal en la causa para justificar la detención.

Si bien la escena quedó filmada y no hay dudas en el video que muestra a Marcozzi golpear al detenido, la fiscal Hirigoyen solicitó una pericia de sonido para escuchar con claridad la “conversación” que se da entre los hombres.

Es que, entre los golpes, se puede escuchar al comisario mayor decir frases como “Vos estás vendiendo celulares”, “a qué local le vendés” o “dale, dale que te voy a romper todo”.

Puntualmente, la fiscal quiere escuchar bien lo que dice Marcozzi para saber si con los golpes el comisario mayor buscaba sacarle información al detenido y si, además, le exigía dinero.

La fiscal lamentó que la persona que filmó el video y lo hizo circular por las redes lo haya borrado, ya que con el original sería más sencillo “rescatar” un mejor sonido. Las pericias fueron pedidas a los peritos informáticos de Mar del Plata y, en casa de no poseer los recursos para lograrlo serán enviadas a La Plata.

Una vez que las pericias se concreten, la fiscal llamará a declarar a los policías, que podrían seguir imputados por “apremios ilegales” o con una calificación más grave.

Por otra parte la víctima, que estuvo detenida en la Unidad Penal 44 de Batán por el robo de celulares, declaró en la causa aunque no aportó información relevante.

Además, también dio su testimonio la persona que filmó la situación y explicó que si bien un policía le había pedido que eliminara el video, nunca se sintió amenazado.

La Auditoría General de Asuntos Internos del ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires abrió un sumario para investigar el caso y al conocerse las imágenes desefactó a los policías involucrados, lo que significa el relevo de su cargo, el retiro del uniforme y armamento provisto por la fuerza.

El apremio se registró en un hotel de Gascón y Buenos Aires, a menos de 200 metros de la Jefatura Departamental cuando el propio Marcozzi y dos policías, el oficial subayudante Alan Braian Harkan y el teniente 1ro. Walter Almaraz, acudieron para recuperar un teléfono celular robado que denunciaba su localización por el sistema de gps. Tras entrar al lugar descubrieron que los responsables de robar cerca de 20 aparatos eran un colombiano y una mujer argentina.

De acuerdo a lo que se desprende de las imágenes captadas por la cámara de un empleado del lugar los policías llevaron al detenido al sector que parece ser de cocina del hotel.

En la secuencia se ve que un policía de civil golpea en el rostro al colombiano detenido y luego Marcozzi le retuerce la oreja, el pezón y en el final del video se lo ve golpeando con un guante de goma.