El ministro de Defensa, Agustín Rossi, informó este sábado que el Gobierno planea incorporar un buque polar para acompañar al Rompehielos Almirante Irízar en la tarea de abastecer las bases argentinas en la Antártida y consideró que se debe avanzar en el desarrollo de un sistema de logística particular.

“Estamos analizando propuestas y proyectos para avanzar en la incorporación o construcción de un buque polar que es deseable que se construya en nuestros astilleros, pero primero hay que resolver los mecanismos de financiamiento”, dijo Rossi en diálogo con Télam a bordo del buque.

El ministro señaló que eso constituye “una oportunidad de darle otro impulso a la industria naval como se hizo con la modernización de este rompehielos que insumió 1.200.000 horas hombre”.

Rossi acompañó el tramo inicial del Irízar que zarpó esta madrugada del puerto de Buenos Aires hacia la Antártida en la segunda campaña de verano para abastecer las bases argentinas, y desembarcó esta mañana en la ciudad de La Plata.

“Tenemos más de cien años de historia en la Antártida, somos uno de los primeros países en llegar, el que tiene mayor cantidad de bases y uno de los que mayor cantidad de personal tiene desplegado en ese continente”, expresó el ministro.

“Además de las 6 bases permanente y las 7 temporales, de la patrulla antártica combinada que mantenemos con Chile y de las campañas antárticas que organizamos todos los años también sostenemos una gran cantidad de investigaciones científicas en campos como la biología, la geología o la meteorología”, añadió.

Rossi detalló que “para las Fuerzas Armadas argentinas la campaña antártica es el mayor ejercicio de despliegue y logística que tienen todos los años, en el que cada verano se movilizan hasta mil efectivos y hay cerca de 300 que pasan el invierno en las bases permanentes”.

“Argentina tiene uno de los dos puentes aéreos más importantes con la Antártida en la base Marambio, junto al que Chile opera desde la base Frei; además estamos operando por debajo de la potencialidad que tiene Ushuaia como polo logístico antártico, que es uno de los grandes proyectos de infraestructura que tiene que desarrollar el país”, precisó.

En ese sentido, indicó que “el rompehielos marca una diferencia entre la Armada Argentina y las del resto de América Latina. Para mí es motivo de muchísima emoción la posibilidad de navegar en el Irízar después de haberlo recorrido en muchísimas oportunidades durante las reparaciones y modernización”.

“Este buque nos permite llegar a las bases más inaccesibles y cercanas al polo, rompiendo bloques de hielo y abriendo camino a otras embarcaciones, nos faltaría un buque polar que trabaje en conjunto con el rompehielos para acompañarlo llevando mayor cantidad de carga”, concluyó.