Una fiesta clandestina fue desactivada durante la madrugada
La secretaría de Seguridad, junto a la subsecretaría de Inspección General llevó a cabo un intenso operativo en la noche de fin de año, que arrojó el secuestro de pirotecnia, el control de eventos masivos y de una fiesta clandestina que fue desactivada.
Gracias a la denuncia previa de algunos vecinos, y la tarea conjunta con la policía de la Provincia, se logró desactivar una fiesta clandestina que se desarrolló en el barrio Los Troncos.
Los efectivos llegaron a la zona e iniciaron la intervención en esta casa particular donde se iba a desarrollar una fiesta para la cual se habían vendido entradas -incluso a través de las redes sociales- por un valor de $500.
En el lugar se iba a dispensar alcohol sin control ni habilitación y finalmente el personal policial secuestró parlantes y demás objetos lo que evitó que finalmente la fiesta no se llevara a cabo.
Desde las áreas de Seguridad e Inspección General, junto a personal de la Delegación Puerto, también se llevaron a cabo operativos conjuntos en dos fiestas en dos balnearios de la zona sur de nuestra ciudad, en las que pudo constatarse que cumplían con todas las normativas de seguridad solicitadas.
Pirotecnia
Por otra parte, junto a la Dirección de Explosivos se procedió a realizar operativos en distintos puntos de la ciudad que permitió el secuestro de unos 4300 objetos de pirotecnia que se vendían en la vía pública atentando contra la normativa recientemente dispuesta por el Ejecutivo y refrendada por el Concejo Deliberante, que lo prohíbe.
Los operativos se llevaron a cabo en barrio Libertad, y en las zonas de Camet y Puerto entre otras, y permitieron desarmar puestos callejeros que vendían estos productos, así como interceder una camioneta con un centenar de artefactos explosivos.
Producto de estas intervenciones y del decreto se observó una considerable merma en la detonación de estos objetos durante estas fiestas, y tampoco hubo heridos.