Tras el incendio, remueven los escombros y preparan la demolición total de la distribuidora
Personal municipal y bomberos trabajan en el lugar. La única parte que aún queda en pie es la fachada que da sobre la calle Rivadavia.
Luego de 36 horas de trabajo para sofocar el fuego que destruyó por completo la distribuidora Torres y Liva y 47 viviendas de los alrededores, bomberos y personal del Ente Municipal de Vialidad se encuentran por estas horas llevando adelante tareas de remoción de escombros y se preparan para la demolición total de la estructura.
Por el alcance de las llamas que se propagaron en cuestión de minutos por la casi media manzana que ocupaba el edificio, poco es lo que hasta el momento se mantiene en pie en la zona de la tragedia. Los trabajos del personal especializado para remover escombros y apagar los diferentes focos de incendios que se mantuvieron encendidos hasta ayer por la tarde, terminaron de derribar las estructuras que no habían cedido ante el fuego.
Esta mañana y con el fuego completamente controlado, se procederá al retiro de la mayor parte de los escombros presentes en el lugar para poder luego demoler la totalidad de edificio. La única parte que aún queda en pie es la fachada que da sobre la calle Rivadavia.