Notición para el básquetbol argentino. Dallas Mavericks, de la NBA, acordó incorporar por tres temporadas al alero de Peñarol, Nicolás Brussino, quien tenía firmado con el club marplatense una cláusula de salida al exterior que vencía el próximo 15 de julio.
Así se lo confirmó ayer al mediodía a este medio el propio presidente peñarolense, Domingo Robles, momentos después de recibir la novedad por boca de Gustavo Monella, el agente del joven jugador nacido en la localidad santafesina de Cañada de Gómez.
De los tres años que contempla el acuerdo con Brussino, el primero está garantizado, mientras que la franquicia texana tendrá una opción sobre los dos siguientes. Anoche los Mavericks le pidieron a la CABB el pase internacional del jugador, quien cobraría el contrato mínimo de novato: entre 500.000 y 550.000 dólares por la primera temporada.
Brussino había participado hace algunas semanas de un campamento de entrenamiento de Utah Jazz y dejó una buena impresión. Pero finalmente cambió Dallas por Salt Lake City.
El santafesino, después de jugar un gran Argentino Juvenil para la selección de su provincia en Mar del Plata, ingresó en la Liga Nacional reclutado por Regatas Corrientes en la temporada 2012/2013 y pasó a Peñarol en la 2015/2016. Aquí su juego dio un salto de calidad y terminó el torneo con promedios de 14,6 puntos, 5,5 rebotes, 3,1 asistencias y poco más de 28 minutos.
Brussino, quien entrena en el Cenard con la preselección nacional que se prepara para intervenir en los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, no cabía en sí de felicidad. “Cuando mi agente me comentó que estaba esta posibilidad de Dallas, no lo podía creer, tenía una alegría inmensa. Así que estoy súper feliz con todo esto. Significa un gran paso para mi carrera, me va a servir para crecer como jugador y como persona. Va a ser una experiencia increíble, así que trataremos de aprovechar todo la más posible”, le dijo al sitio web de la CABB.
“El primer año va a ser de adaptación a la ciudad, al idioma, al estilo de juego, reglamento, así que tengo que ir de a poco. Me servirá para trabajar el físico y adaptarme a todo, y de a poco se verá la posibilidad de jugar. Pero sé que tengo que ir despacio”, sostuvo Brussino.
Y agregó: “Todavía no firmé el contrato, así que estoy esperando ese día, pero muy contento de pertenecer a una franquicia como Dallas. Tranquilo, a esperar que pasen los días, así cuando esté firmado el contrato puedo decir lo mismo”.
“El scouter Lisandro Miranda fue el que pasó los informes míos de la Liga, les gustó cómo jugaba y a medida que fueron pasando los días se fueron interesando y en este receso se pusieron firmes para contratarme”, comentó en rueda de prensa.
“Siempre estuvo el sueño de jugar allá, desde chico uno se lo imagina. Pero que suceda es algo que nunca lo pensé. En este último tiempo sentía que podía cumplir ese sueño al saber que equipos de la NBA me estaban siguiendo, pero nunca imaginé que se concretara”, finalizó.

La repercusión en Peñarol

Nico Brussino, con un año más de contrato, era una de las fichas con las que contaba Peñarol para la próxima temporada de la Liga Nacional de Básquetbol.
“Todavía estoy impactado por la noticia. Pero, por lo pronto, me parece que no hay nacional en el mercado con el que podamos reemplazar a Nico. Tendríamos que buscar a un extranjero”, estimó el presidente Domingo Robles.
Peñarol hoy cuenta con las fichas de Juan Pablo Figueroa, Franco Giorgetti, Leonardo Gutiérrez, Roberto Acuña y el chileno Sebastián Suárez, primer extranjero del equipo.

El segundo en saltar desde la LNB

Nicolás Brussino se convirtió ayer en el décimo jugador argentino en llegar a la NBA, el primero post Generación Dorada. El santafesino se suma a la lista que componen Rubén Wolkowyski, Juan Ignacio Sánchez, Emanuel Ginóbili, Andrés Nocioni, Luis Scola, Carlos Delfino, Walter Herrmann, Fabricio Oberto y Pablo Prigioni.
Brussino será el cuarto argentino en la temporada 2016-2017 de la NBA junto a Ginóbili, Scola y Prigioni. Mientras todavía otros, como el marplatense Patricio Garino -intervino con buen suceso en la Summer League jugando para Orlando Magic-, todavía sueñan con hacerlo.
El dato saliente, sin embargo, es que se convertirá en el segundo jugador en saltar a la NBA directamente desde la Liga Nacional, tal vez el menos habitual de los caminos. El primero fue otro jugador relacionado con Mar del Plata, el pivote ex Quilmes Rubén Wolkowyski, quien emigró desde Estudiantes de Olavarría a Seattle Supersonics (2000).