La Sociedad Rural de Mar del Plata celebró ayer sus 100 años de historia con un gran asado en su predio ferial ubicado en el kilómetro 17,5 de la Ruta 88, donde unos 250 productores de la zona, familias del agro y autoridades se dieron cita.

Representantes de la Sociedad Rural Argentina, la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), la Confederación Rural Argentina (CRA) y la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), entre otras entidades, acompañaron a la comisión directiva de la Sociedad Rural de Mar del Plata que preside el ingeniero Esteban Area, principal anfitrión de la celebración, a la que también asistieron concejales de distintas fuerzas políticas.

El festejo, con empanadas, chorizos y costillares de por medio, se llevó a cabo durante una jornada de calor que permitió realizar juegos para los más chicos, una exposición de maquinarias y artículos rurales, y la presentación del conjunto los Pichi Huinca.

El festejo comenzó con la bendición del padre Juan Cruz Mennilli Caldararo, quien acercó el saludo del obispo diocesano Gabriel Mestre, y expresó su deseo de prosperidad a todo el campo argentino.

El ingeniero Esteban Area se encargó además de entregar reconocimientos a ex titulares de la entidad y a los descendientes de los presidentes fallecidos, como así también de rendir honor y memoria a los impulsores de la institución.

Entre las autoridades presentes, estuvieron el presidente del Concejo Deliberante, Guillermo Sáenz Saralegui; los concejales Alejandro Carrancio (Crear), Marcelo Carrara (Agrupación Atlántica) y Cristina Coria (UCR).
Entre los funcionarios se registraron importantes ausencias. El presidente del Ente Municipal de Servicios Urbanos (Emsur), Eduardo Leitao, fue el único integrante del gabinete municipal que se acercó a la celebración.

El intendente Carlos Arroyo estuvo ausente, como también el jefe comunal electo, Guillermo Montenegro, quien había comprometido su asistencia y finalmente avisó que por motivos de agenda no podría participar, como tampoco pudo estar el ministro de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires, Leonardo Sarquís, y su par del gobierno nacional, Luis Etchevehere.

Los inicios

El 6 de noviembre de 1919 se firmó el acta preliminar de constitución de la Sociedad Rural de Mar del Plata, con la presencia de Tomás Vignolo, Manuel González Guerrica y Luis Torricelli, reunidos en el domicilio de éste último en la zona céntrica de la ciudad. Ese día se constituyó la “Comisión Iniciadora y Fundadora”.

El 30 de noviembre de ese mismo año se le dio nombre definitivo a la institución y se designó a la primera comisión provisoria, presidida por Manuel González Guerrica.

A fines de ese año, la Sociedad “Jockey Club Mar del Plata” cedió en carácter precario y gratuito sus instalaciones del hipódromo para realizar la primera exposición ganadera e industrial.

Desde entonces, a través del tiempo y con regular cambio de autoridades, la Sociedad Rural de Mar del Plata consolidó un camino que afianza e integra la labor de los productores agropecuarios de la región, siendo ésta una de las instituciones de mayor trayectoria del país.

Presente y futuro

El festejo por el centenario de la Sociedad Rural de Mar del Plata coincidió con el período de transición de gobierno. A pesar de las diferencias, entre los productores primó una mirada que muchos se encargaron de exponer durante la celebración.

Tanto las autoridades del Coninagro, como de la CRA y la Sociedad Rural Argentina coincidieron en el impacto positivo de “algunas” políticas impulsadas por el gobierno de Mauricio Macri para el campo, principalmente en lo que hace a la apertura de las exportaciones y al crecimiento de la demanda mundial de carne vacuna, cerdo, maíz, trigo y soja.

De cara al cambio de mando y la asunción del nuevo gobierno que tendrá como presidente Alberto Fernández, los mismos sectores destacaron la necesidad de que se fortalezca el diálogo y se pongan en marcha políticas que alienten la exportación y reduzcan la presión impositiva, pero principalmente que contengan “reglas claras” para la industria del agro.

– Un llamado a la unión del campo y la ciudad en pos del crecimiento

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– “Siempre tuvieron el compromiso de defender los valores del trabajo”