El director de Agroindustria de la Provincia de Buenos Aires, ingeniero Eduardo Soto, visitó las instalaciones de la Unión del Comercio, la Industria y la Producción en el marco de la política institucional de acompañar a todos los sectores de producciones intensivas de la región. El funcionario junto a integrantes de la Asociación Frutihortícola de Productores y Afines de General Pueyrredon recorrió la zona productiva y luego se reunió con referentes de la Asociación de Productores de Papa Semilla de Buenos Aires.
Eduardo Soto recorrió la zona frutihortícola, con el objetivo “de armar el mapa de actores que va a conformar el cluster, que permite que un grupo de empresas interrelacionadas que trabajan en el mismo sector, colaboren estratégicamente para obtener beneficios comunes” y, también trabajar sobre “los objetivos y el programa de competitividad”.
El funcionario manifestó que son distintas “las problemáticas que se presentan según sean pequeños y medianos o grandes productores”.
Explicó que “los más pequeños tienen problemática productiva, dificultad de acceso a tierra y problemas de intermediación que afecta su negocio hoy día. En cambio en los grandes hay problemas de informalidad, de financiación y algunas de las medidas actuales les ha encarecido la producción y eso hace que estén pasando un momento un poco complicado”.

Zona hortícola

Frente a esta situación indicó que “estamos intentando trabajar sobre los problemas de fondo en las dos zonas, en Mar del Plata y en el Círculo Platense que son las dos principales regiones de producción hortícola de la provincia”.
Durante la reunión Appasba presentó una solicitud para elevar la exigencia de estándar sanitario de la papa de producción de semillas en los partidos de exclusión que son Tres Arroyos, Chavez y San Cayetano. Referentes de la asociación comentaron que la misma “produce en tres partidos que involucra un área diferenciada dentro de la Provincia e inclusive dentro del país. Nuestra problemática es preservar en el tiempo la sanidad que actualmente tenemos ya que nos permite un estatus sanitario destacado. A los efectos de esto peticionamos elevar la categoría sanitaria del material a plantar. Lo cual es una ‘auto exigencia’ que involucra nada más que tener un propósito de mejorar la estructura sanitaria”.
La reunión fue convocada para evaluar la posición de las distintas instituciones que están involucradas en el tema. Estuvieron representantes de Ministerio de Agroindustria de la Nación, del Ministerio de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires, de Senasa, del Instituto Nacional de Semillas (Inase), de UPRI y de la Asociación Frutihortícola de Productores y Afines de General Pueyrredon.