La CGT pidió que Mar del Plata “no sea una isla de desamparo”
La regional local de la central obrera celebró el triunfo de Alberto Fernández y de Axel Kicillof. Cuestionó a Cambiemos y deseó que la gestión de Guillermo Montenegro "esté a la altura de las necesidades de los ciudadanos".
Miguel Guglielmotti, Adriana Donzelli y Sergio Arista, dirigentes de la CGT local.
La regional local de la Confederación General del Trabajo (CGT) celebró este viernes los resultados de las elecciones generales en la provincia y la nación, al tiempo que pidió que Mar del Plata “no sea una isla de desamparo”.
En su primer pronunciamiento tras las elecciones del domingo, el plenario de secretarios generales destacó que “la victoria electoral del Frente de Todos a nivel nacional y en la provincia de Buenos Aires representa para la clase trabajadora la expectativa de comenzar una etapa de recuperación de derechos, de recuperación de salario, de recuperación del empleo”.
Recordó su advertencia sobre “el daño que las políticas de Cambiemos han generado en el mundo del trabajo”, y señaló que “el predominio de la especulación financiera sobre la producción, el techo a las paritarias frente a la devaluación de nuestra moneda y la escalada inflacionaria; el deterioro del sistema de seguridad social, la dolarización de los servicios públicos, tasas de interés que han hecho inaccesible el sistema crediticio, el exorbitante endeudamiento y el creciente aumento del desempleo serán parte del doloroso recuerdo de una gestión que ha descuidado a las mayorías nacionales para favorecer a pequeños grupos del capital especulativo financiero”.
Los gremialistas subrayaron que “una población empobrecida y con enormes dificultades para conseguir empleo ha decidido poner fin a este modelo para ir hacia una propuesta que contiene a los distintos sectores del campo popular, al empresariado nacional, a sectores académicos y sindicales”.
Puntualizaron además que “el proyecto de país soberano y de crecimiento con inclusión social que propone Alberto Fernández deberá tener su eje en el trabajo, la industria nacional y el fortalecimiento del mercado interno”, a la vez que “requerirá el establecimiento de prioridades para empezar a salir de esta profunda crisis social, así como de consensos y de una responsable articulación de esfuerzos en miras del bien común”.
“El lugar de nuestra regional seguirá siendo el de la reivindicación de las demandas de los trabajadores, la búsqueda de soluciones a los acuciantes problemas de la población marplatense, como asimismo contribuir a la creación de oportunidades en condiciones igualitarias para todos”, apuntó.
Los secretarios generales aseguraron que exigirán al intendente electo, Guillermo Montenegro (Juntos por el Cambio), “las políticas necesarias para garantizar la mano del Estado presente en todos los barrios de Mar del Plata y Batán” y le advirtieron que “de él dependerá que nuestra ciudad no sea una isla de desamparo, como ha sido estos últimos años”.
“Necesitamos con urgencia que se promueva el empleo a través del impulso al turismo, a la industria local, al comercio”, indicaron.
Tras la declaración de la emergencia alimentaria, reclamaron que “se garantice la asignación de partidas para hacer frente al hambre” de la población, al tiempo que consideraron imprescindible “que el municipio atienda las demandas de los sectores de la economía popular”.
“No nos resignamos a ser la capital del desempleo, a las persianas que bajan, a tener un tercio de la población bajo la línea de la pobreza, a ver sufrir a los abuelos que no pueden costear los medicamentos. La nueva etapa que se inaugura en la nación y en la provincia nos permiten avizorar que la solución a los problemas se dará, lenta y con complejidades, pero indefectiblemente. Esperamos que la gestión local esté a la altura de las necesidades de los ciudadanos”, cerraron.