BALCARCE (Corresponsal)- Eran las tres de la tarde del martes pasado. El sol disimulaba un poco el frío que hacía en la tarde balcarceña. Poca gente a esa hora andaba por la calle. Como es habitual el horario de siesta se respeta a raja tabla en el pueblo.

Tal vez teniendo en cuenta todos estos atenuantes, un sujeto de alrededor de 40 años decidió hacer sus necesidades en la vía pública.

La persona venía caminando por avenida Kelly hacia plaza Libertad. Lo hacía por la plazoleta que divide los carriles, sirve de estacionamiento de automóviles y, en especial, es una importante área utilizada por todos aquellos que desean caminar o correr al aire libre.

A simple vista parecía ser uno de ellos. Estaba vestido con indumentaria deportiva, un gorro y una mochila.

Por la vereda de enfrente y en la misma dirección otro transeúnte disfrutaba también la caminata. Era una tarde habitual de esas que no pasa nada hasta que sucedió el imprevisto.

El vecino vio cómo la persona que caminaba en paralelo se detuvo en la esquina de calle 25 y se agachó. Pensó que podría haber sufrido una descompensación. Eso hizo que prestara atención y se alistó como para ayudar en caso de una emergencia. Nada de eso fue lo que pasó.

Mayúscula fue la sorpresa cuando se dio cuenta que el hombre de ropa deportiva se había hincado y estaba haciendo sus necesidades con total desparpajo, como si estuviera en el baño de su casa. Sin embargo, se encontraba en una de las avenidas más transitadas de la ciudad.

Eso no importó, ya que para completar la escena de impunidad, una vez que finalizó salió caminando con sus calzoncillos bajos, hizo tres pasos y se los subió, al igual que el pantalón, y siguió su marcha normal.

El otro vecino, pese a su asombro, sacó su celular y grabó toda la escena. Luego la subió al Shopping Virtual Balcarce de Facebook que cuenta con más de 30.500 miembros. Bajo la metáfora de un “agradable sujeto” publicó el video y fue describiendo con su voz cada uno de los pasos escatológicos que dio este desconocido que, a partir de ahora, no lo es tanto.