Resulta imposible no empatizar con Carla y Leonel, los padres de Alan Guevara. Desde hace dos años, ambos sobrellevan de la mejor manera posible poco menos que una cruzada en la búsqueda de la recuperación de su hijo.

En julio de 2017, Alan fue víctima de un accidente de tránsito en Juan B. Justo y Lanzilota. Sus esperanzas de sobrevivir eran mínimas, pero su condición de deportista y la juventud (en ese momento tenía 18 años) contribuyeron a que ganara la primera de cientos de batallas.

La lesión cerebral axional difusa le provocó una desconexión neurológica y se inició una prolongada rehabilitación que tuvo sus primeros pasos en el Inareps.

La lenta evolución llegó hasta un punto y se determinó que para poder seguir avanzando, había que realizar un tratamiento intensivo en el Instituto Fleni.

Claro, había que reunir algo más de 4 millones de pesos y por iniciativa de la familia se lanzó la campaña #TodosPorAlan, por las redes sociales (Instagram, Twitter y Facebook).

“No vamos a terminar de agradecer nunca toda la ayuda y la solidaridad de la gente. Nos sorprendemos a cada paso con las donaciones que se reciben en las alcancías ubicadas en las bocas de Ripsa y por toda la ciudad. Pero lamentablemente, no nos alcanza. Y nunca recibimos colaboración alguna del Estado. Hasta ahora llegamos a 2,5 millones y nos faltan otros dos”, explicó Carla.

Mientras, la obra social no presta servicios en el Fleni y Alan permanece internado en el Sanatorio Sagrado Corazón, en CABA, una clínica de alta complejidad.

“Por suerte Alan sigue progresando, pero ya no tanto. Podría avanzar más con estímulos más intensivos y eso solo es posible en el Fleni. No tiene más la cánula en la tráquea, aumentó de peso, está conectado con la realidad, hace gestos, se ríe y asiente”, aclara Leonel.

“Mejoró mucho con la bomba de baclofeno (implante de un dispositivo que administra medicación las 24 horas directamente a la médula espinal), pero lamentablemente fue afectado por una bacteria dos veces en los últimos cuatro meses. Y eso le provocó un retroceso. Hicimos las pruebas y la bacteria no la genera él. Por eso también queremos trasladarlo al Fleni. Nadie puede quitarnos la esperanza de que Alan -ahora de 20 años- vuelva a ser él”, implora Carla.

A través del animador Mariano Iúdica, quien visibilizó el caso en la televisión abierta, habían conseguido que el Fleni lo aceptara aún mientras todavía se intentaba reunir el dinero, pero la bacteria frenó todo.

Quienes deseen colaborar pueden depositar en la Caja de Ahorro en pesos del Banco Provincia, sucursal 6189, número de cuenta 526431/6 a nombre de Carla Beatriz Soru, CUIT 27-23971649-6