“Caminantes”, una performance de la escritora y dramaturga Romina Paula reúne a un grupo de mujeres que avanza recitando fragmentos de autoras famosas, con la particularidad de que las performers son Rosario Bléfari, Dolores Fonzi, Pilar Gamboa y Julieta Venegas, entre otras.

Textos de Emily Dickinson, Marosa di Giorgio, Cynthia Edul, Magalí Etchebarne, Sara Gallardo, Leila Guerriero, Constanza Gutiérrez, Alejandra Kamiya, Clarice Lispector, Alice Munro, Alejandra Pizarnik, Hebe Uhart, Idea Vilariño, Vivian Gornick y Lucia Berlin resonarán en las paredes del Patio de los Naranjos, el corazón del Centro Cultural Recoleta, Ciudad de Buenos Aires, como parte de la programación de la Bienal de Performance 2019.

Durante la performance, este grupo de mujeres se desplaza, avanza y no se va a detener: un grupo de distintas edades que lee textos siempre de mujeres, trasladándose por el perímetro del patio de los naranjos.

Las actrices y cantantes que participan de la acción -es decir las performers- caminan en paralelo a los muros como quien decide sobre su cuerpo mientras puedan marchar y desplazarse, y tener voz.

Este proyecto se enmarca en la BP.19 que se realiza del 9 al 31 de mayo en diferentes instituciones con artistas argentinos e internacionales, un variado y contundente programa que incluye a músicos, poetas, artistas escénicos, cineastas, fotógrafos, artistas visuales y coreógrafos, una constelación que pone de manifiesto la naturaleza transdisciplinar y colaborativa que caracteriza a la performance.

“Sin duda el elemento de los efímero es uno de los rasgos más potentes de la performance. Del suceso, del evento, de lo irrepetible”, cuenta a Télam Romina Paula (1979), multifacética creadora, autora de libros como “¿Vos me querés a mi?” y “Acá todavía”, que además se prepara para estrenar el 6 de junio en salas locales su ópera prima cinematográfica “De nuevo otra vez”.

– ¿Cómo llegó al título de la performance “Caminantes”?

– El título es bastante literal, porque es lo que van a estar haciendo, además de leer. Pero un poco homenajea a las protestas que se hacen caminando, como si fuera algo que nadie puede quitarte. Yo camino mucho por la ciudad, intento hacer todo caminando si tengo tiempo, y siempre me siento muy poderosa desplazándome así, me da una sensación de autonomía, de libertad, de algo que nadie me puede quitar mientras tenga salud; me da la sensación de que mis piernas pueden llevarme adonde quiera.

– ¿Cómo fue el proceso de selección de los textos que se van a leer?

– A las autoras las seleccionamos con Lucía Villanueva, que hizo la elección de los textos. Intentamos que hubiera vivas y muertas y más en idioma original que traducidas. Y después hicimos una suerte de dramaturgia de las lecturas en su secuencia. Son todas autoras que nos encantan, claro.

– Usted es escritora, dramaturga, directora y ahora también estrena su opera prima, en la que además actúa. ¿Cómo se combinan todas esas actividades? ¿Alguna le demanda mayores desafíos?

– Trato de concentrarme en lo que estoy haciendo en cada momento, como si fuera lo único que hago. Creo que lo que menos me divierte o más nerviosa me pone es actuar en proyectos de otros, eso me da más inseguridad. Después todos los otros rubros me gustan mucho y aprendo mucho de cada uno cuando los transito.

– ¿A qué cree que se debe la vigencia y permanencia de la performance?

– Sin duda el elemento de lo efímero es uno de sus rasgos más potentes. Del suceso, del evento, de lo irrepetible.

Una obra de teatro también tiene algo de eso pero se suele hacer más veces y suele estar más ensayada también, con las cosas más bajo control. Ese factor de riesgo y azar de la performance me fascina cuando la hago y cuando la veo. Pero, a diferencia de ciertas ideas que circulan, no creo que tenga algo que ver con las relaciones actuales mediadas por la tecnología. Al contrario, por suerte este tipo de performance y el teatro también aún demandan que la gente esté ahí, vaya, venga, que esté presente para que el fenómeno se produzca. Y en gran medida su poder reside en eso: en juntarse.

El elenco se completa con Mariana Chaud, Cynthia Edul, Magalí Etchebarne, Nina Suárez, Alejandra Kamiya, Margarita Molfino, Agustina Muñoz y Paula Trama.