En el marco del conflicto que desde principios de mes se vive en la facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata, ayer se sumó un nuevo episodio al no poder sesionar de manera extraordinaria el Consejo Académico por impedimento de los integrantes del Centro de Estudiantes, que reclaman en desacuerdo con las modificaciones propuestas al actual régimen de enseñanza educativa.

Mientras que la decana Ana María Hermosilla reclamó “diálogo” por parte de los estudiantes, la cuestión será tratada hoy en el Consejo Superior.

Un grupo de estudiantes de Psicología tomó, el 6 de mayo, el Consejo Académico de esa casa de estudios para protestar por la modalidad que se intenta implementar y por las modificaciones del nuevo régimen de enseñanza educativa.

Al estar tomado el espacio físico donde funciona el Consejo Asesor por integrantes del Centro de Estudiantes, ya que los estudiantes pernoctan allí, ” no se pueden sacar los expedientes y no se puede sesionar, eso acarrea perjuicios concretos, como la no designación de algunos docentes”, explicó la decana.

En ese marco de tensión, ayer se decidió realizar “una sesión extraordinaria” en el aula 20 de la mencionada facultad, debido a que es la más grande del edificio, pero los integrantes del Centro de Estudiantes no permitieron el ingreso ni de los docentes ni de los graduados.

“No nos dejaron entrar -contó Hermosilla-, ya que los consejeros y consejeras pretendíamos iniciar la sesión pero estuvimos imposibilitados de hacerlo por la presidente del Centro de Estudiantes, Florencia Menna, y otros estudiantes. Así que nos retiramos, los docentes y graduados, al sector administrativo para conversar sobre lo sucedido. Fue un momento tenso”.

Así las cosas, la decana escuchó los reclamos de los estudiantes que pidieron “una mesa de diálogo con integrantes externos de la universidad para que mediaran, pero eso sería renunciar a la autonomía de la facultad”. Los estudiantes consejeros tampoco dijeron presente, así que se volvió imposible sesionar.

Conflicto

La situación llegó a un punto de máxima tensión el 6 de mayo con la toma, pero la discusión se originó a principios de años con el inicio de las conversaciones para “llevar adelante modificaciones a las modalidades y al régimen de cursadas. Llevamos más de 15 horas de discusión, llegando a acuerdos que los hemos incorporado al proyecto. El claustro docente está de acuerdo con los cambios, no es una cuestión de esta gestión”, señaló Hermosilla.

Entre las modificaciones propuestas figuran que los alumnos puedan acumular 12 materias sin rendir final en lugar de las 16 actuales (la carrera está compuesta por 31 materias) y actualizar el vencimiento de las materias cursadas a 6 años cuando en la actualidad carecen de vencimiento.

Todos estos planteos “fueron consensuados con los consejeros, hoy las situaciones cambiaron, por eso comenzamos a hablar para ponerlos en práctica a partir de 2020 porque nada es retroactivo”, explicó Hermosilla.

Asimismo, aseguró que las formas tal como funcionan hoy “atentan contra la formación de excelencia que pretendemos brindar. No obstante, entendemos lo que los alumnos entienden como una conquista estudiantil. El claustro docente está convencido de las modificaciones necesarias”.

El conflicto intentará destrabarse hoy, cuando sesione el Consejo Superior, aunque la decana insistió con la “necesidad de retomar el diálogo, que es fundamental”.

“Esta nueva modalidad de estudio que quieren implementar los docentes y graduados, implicaría un retroceso en la carrera y afectaría la vida académica de miles de estudiantes que verán cercenados sus derechos”, habían explicado días atrás los integrantes del Centro de Estudiantes de Psicología.