El cuarteto integrado por Walter Castro en bandoneón, Quique Condomi en violín, Horacio “Mono” Hurtado en contrabajo y Esteban Morgado en guitarra, trae a Mar del Plata el festejo por su 20 aniversario. Junto a la gran voz de María Gaña, la celebración será con su particular y renovador sonido tanguero, este sábado 11 de mayo en Teatriz.

La formación ha realizado numerosas giras por el mundo, siendo aclamados por la crítica y el público. Sus temas Morena, Milonga de la Puteada, Tango del último Amor, las versiones de Cinema Paradiso o Cada vez que Respiras y las interpretaciones de Libertango, Oblivion y Milonga del ángel de Astor Piazzolla, dirán presente en la celebración de estos 20 años en Mar del Plata. El show se realiza en el marco de una importante agenda que luego los llevará al Festival de Tango en Brasil, a Medellín y la gran presentación en el Teatro Opera de Buenos Aires.

“Estamos transitando este aniversario con mucha felicidad, con mucha alegría, con muchos discos en nuestros haber, con muchos viajes, muchas actuaciones, mucha alegría, mucha felicidad por estar haciendo nuestra música” indicó el guitarrista, compositor y arreglador Esteban Morgado en una nota a LA CAPITAL. Y valoró a sus compañeros señalando que en el cuarteto “tienen un aporte creativo extraordinario, son muy talentosos y es un placer trabajar con estos músicos”.

También rescató la posibilidad de compartir el escenario y el espectáculo con María Graña “una de las grandes voces de la historia de nuestra música, siendo una mujer joven con una amplísima trayectoria a la que nos da mucho placer acompañar. Hay un ida y vuelta muy hermoso entre lo que ella canta y la música con que la acompañamos, hay un muy lindo contrapunto y vamos a hacer sus clásicos, más algunas perlitas, algunos tangos nuevos en su repertorio, pero seguramente van a estar Canción desesperada y Caserón de tejas entre otros éxitos”.

– ¿Qué es, según su criterio, lo que hace que el tango siga manteniéndose en vigencia?

– El tango sigue en vigencia y más vivo que nunca, porque aparecen muchos nuevos valores, nuevos instrumentistas, nuevos músicos, arregladores, nuevas orquestas, nuevos cantores, cantoras, y esto tiene mucho que ver con el traspaso que se va haciendo, afortunadamente, de nuestra generación a los chicos nuevos. Muchos estamos dando clases hace muchos años, hay mucha gente formándose y muy bien, hay escuelas, conservatorios que han tomado la buena idea de enseñar tango, con todo lo que esto significa. El arreglar, el escribir para una orquesta implica muchos conocimientos de armonía, de contrapunto, de orquestación y afortunadamente esto se ha hecho y se hace en muchas, incluso universidades, en muchas facultades, en conservatorios, en la escuela de música popular de Avellaneda y en tantos otros sitios en donde nos toca a nosotros, los de nuestra generación pasar la posta y lo hacemos con muchísimo cariño, con mucho respeto por los nuevos instrumentistas, por los nuevos actores dentro del tango y obviamente con muchísimo respeto por el género mismo,

– ¿Qué desafíos tiene en la actualidad componer música ciudadana? ¿Qué lo inspira particularmente?

– Afortunadamente hay muchos poetas que están trabajando la temática de hoy. Hoy por ahí no se le canta al farolito y hay que ver como se le puede cantar a la internet o al Spotify, o al Whatsapp, es difícil de meter eso en una poesía pero hay problemáticas que tocó el tango en todas sus épocas que siguen siendo las mismas: la angustia existencial, la filosofía, los amores, los desencuentros, las partidas, los engaños y tantas situaciones que hacen al decir en una canción. Por supuesto no es solo el tango quien se ocupa de estas problemáticas, que son en definitiva las problemáticas de la vida, pero el tango lo hace con una poética, con una poesía muy particular, ha habido grandísimos poetas y hay afortunadamente en la actualidad mucha gente joven y no tan joven, pero que está escribiendo nuevos poemas que se llevan al tango y creo que esto es lo que lo hace vigente.

Desde siempre ha habido un contenido social en muchos tangos, por ejemplo, la poesía de Discépolo, ha habido tangos humorísticos, ha habido tangos filosóficos, de amor y tantas otras cosas. Y eso hoy mismo sigue ocurriendo.

– ¿Cómo cree que está, hoy, el diálogo entre el tango y otros géneros musicales?

– Creo que el diálogo entre el tango y otros géneros musicales se da por la iniciativa de los artistas, en mi caso a mi me gusta llevar músicas que no lo son originalmente al tango como un guiño de complicidad con la gente que escucha una versión ‘milonguiadita’ de Blackbird o una versión tanguera de la música de Cinema Paradiso. En todos los discos o en todos los materiales que vamos preparando año tras año con el cuarteto siempre aparecen temas que no son tangueros, y creo que esto refresca el género y le da también otro vuelo.

También son puertas de entrada para los chicos que empiezan a bailar y de repente entran a bailar tango a partir de un arreglo de temas de Queen en forma de tango o de Sting y terminan bailando tango con la orquesta de D’Arienzo y esto me parece que esta bueno, son puertas de entrada al género. El género afortunadamente es muy amplio y permite tener un montón de expresiones, creo que no hay una postura ideológica o un mandato de decir hay que emparentarse o hay que fusionarse con otros géneros, esto se da por iniciativa de los músicos que lo hacemos y creo que esta bueno poder hacerlo.