El presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires, Manuel Mosca, presentó este lunes mediodía en la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N11, encabezada por Álvaro Garganta, una denuncia para solicitar que se investigue el delito de coacción agravada y extorsión, por sentirse “víctima de una maniobra extorsiva, iniciada en diciembre de 2018, en torno a una supuesta denuncia de acoso sexual contra su persona”.

Tras salir de la fiscalía, informó que pidió una licencia- sin goce de haberes – a su banca de diputado (y por consiguiente a la presidencia del cuerpo) y solicitó su desafuero “a efectos de facilitar el normal desenvolvimiento de cualquier proceso judicial”.

Desde su entorno señalaron que el presidente de la Cámara ”siente que no es justo hacerlo siendo titular de otro poder del Estado” y fuentes judiciales, dejaron trascender que habría presentado aproximadamente 50 nombres de personas de diferentes ámbitos que le habrían expresado de diciembre hasta ahora,  haber sido contactados por diferentes vías “para ofrecerles participar de una denuncia contra él o, en el caso de algunos periodistas, darle difusión anticipadamente a la noticia de una denuncia”.

Esta es la segunda presentación judicial de parte de Mosca, sobre este tema. La primera fue realizada durante el mes de diciembre, a partir de los primeros mails intimidatorios, pero en esta ocasión presentaría como pruebas audios, correos electrónicos y conversaciones de whatsapp que sustentarían el contenido de la denuncia.

El pedido de licencia y desafuero será tratado en una sesión convocada por el propio Mosca para el próximo jueves 9 de mayo.

Lo que dice la Constitución

La figura del “desafuero” como estamos acostumbrados a escucharla, no existe como tal ni en la Constitución de la provincia (reformada en 1994) ni en el Reglamento interno de la Cámara baja. Lo que si marca la Carta Magna Provincial en su artículo 97, es la “inmunidad” de la que gozan sus miembros (fueros) y la suspensión de los mismos en su cargo –artículo 98-, lo que vulgarmente se conoce como desafuero.

Según la manda constitucional, sólo puede suspenderse a un diputado o senador, si es sorprendido en flagrancia y no ante la denuncia de un tercero, aunque el texto del artículo 98 podría darse a interpretación.

La intención de Mosca es la de no entorpecer la investigación de la justicia,  aunque para ello no renuncia a su banca sino que decide poner en consideración el tema con sus pares, en una Cámara en la que su bloque tiene el control y que le devolvería el cargo y la banca si la denuncia en su contra no prospera.

Artículo 97.- Los senadores y diputados gozarán de completa inmunidad en su persona desde el día de su elección hasta el día en que cese su mandato, y no podrán ser detenidos por ninguna autoridad sino en caso de ser sorprendidos en la ejecución flagrante de algún crimen, dándose inmediatamente cuenta a la Cámara respectiva, con la información sumaria del hecho, para que resuelva lo que corresponda, según el caso, sobre la inmunidad personal.

Artículo 98.- Cuando se deduzca acusación ante la justicia contra cualquier senador o diputado, examinado el mérito del sumario, de la acusación o información traída, podrá la Cámara respectiva, con dos tercios de votos, suspender en sus funciones al acusado, dejándolo a disposición del juez competente para su juzgamiento.