Quilmes resultó dominador durante la mayor parte del partido. Sin embargo, no logró sostener ese rendimiento hacia la parte final del partido, su resistencia se desmoronó y Libertad de Sunchales lo superó, en el “Hogar de los Tigres”, por 92 a 84.

De esta manera, el “tricolor” retrocedió un casillero en su lucha por permanecer en la Liga Nacional de Básquetbol.

Quilmes jugó muy bien en el cuarto inicial, consiguió abrir una brecha del orden de los 8 puntos y logró hacer coincidir buenos pasajes defensivos con abundante gol.

Especialmente a partir del tiro exterior, sobre todo con Winsome Frazier y Lucas Ortiz, quienes a lo largo de toda la noche resultaron las vías de gol más confiables para el conjunto de Javier Bianchelli.

Con algunos vaivenes, ya que Libertad reaccionó bien, de la mano de Diego Figueredo, Quilmes logró sostener su liderazgo antes de llegar al descanso largo. Sin defender tan bien como en el cuarto anterior, pero amparado en una eficacia suprema en el tiro de tres puntos (8/11, 72% en el primer tiempo), con 15 puntos de Ortiz y 14 de Frazier.

Y pese a que logró prevalecer durante los primeros 20 minutos, precisamente ese guarismo de efectividad causaba cierta incertidumbre porque no es posible sostener esos porcentajes durante tanto tiempo.

Un detalle importante: al iniciarse el segundo cuarto se produjo el debut del recién llegado Richard Jackson, de quien no se podía esperar demasiado. El pivote estadounidense terminó su primera noche con la camiseta “tricolor” con 4 puntos (2/3 en dobles), 3 rebotes, 1 tapa y 1 pérdida en 15 minutos de juego.

Indudablemente, las respuestas defensivas no fueron las mismas en las filas del equipo de Javier Bianchelli, y a la larga, eso fue lo que le costó la derrota.

Después de aquel primer cuarto de apenas 15 puntos convertidos, Libertad dibujó segmentos de 25, 27 y 25 puntos. Demasiados.

Los sunchalenses mejoraron su aciertos a distancia pero sobre todo, establecieron marcadas diferencias en la cantidad de puntos anotados por la vía del contraataque y también en el aporte de los respectivos bancos de relevos, aspecto en el que cual los “Tigres” tomaron distancias apreciables: 28 puntos contra 11 que ofrecieron los relevos quilmeños.

Al visitante, como era de esperar, la efectividad ya no lo acompañó tanto desde el perímetro. Y esa caída en la productividad no pudo apuntalarla con defensa.

Libertad equilibró el desarrollo y el resultado en el tercer cuarto, con sólidas respuestas de Agustín Caffaro y Erik Thomas.

Y aunque Quilmes, con un rato de defensa y un pasaje positivo de Eduardo Vassirani, logró arrancar adelante en el último cuarto, ya no consiguió hacerse con el control como en buena parte de lo que había quedado atrás.

Además, al margen de la gran evolución de Nicolás Copello anotando seguido, y la floja respuesta defensiva, en los últimos 3m30s, los de Luro y Guido también se quedaron sin gol y apenas convirtieron 4 puntos.

La síntesis

Libertad 92
N. Copello 20, M. Cuello 13, E. Thomas 13, A. Caffaro 14 y K. Kelley 4 (FI). D. Figueredo 17, A. Alonso 5, E. Zago 6. DT: Sebastián Saborido.

Quilmes 84
V. Fernández 7, L. Ortiz 31, W. Frazier 25, M. Maciel 0 y E. Vassirani 10 (FI). M. Bolívar 7, S. Morales 0, L. Núñez 0, R. Jackson 4. DT: Javier Bianchelli.

Estadio: “Hogar de los Tigres”, de Libertad.

Arbitros: Diego Rougier, Javier Mendoza y Alejandro Trías.
Parciales: 15-23, 40-46 y 67-67.