Peñarol, que vuelve a jugar oficialmente este jueves ante Estudiantes de Concordia, intentará con la incorporación de dos extranjeros encontrar una solución a su crisis deportiva en la Liga Nacional de Básquetbol.

El equipo marplatense arrastra siete caídas consecutivas y si frente a los entrerrianos vuelve a caer igualará su récord histórico de derrotas en fila.

Peñarol vivió en dos ocasiones rachas de ocho traspiés: entre el 9 de noviembre (102-114 vs. Belgrano de San Nicolás, en condición de visitante) y el 5 de diciembre de 1997 (105-111 vs. Estudiantes de Olavarría, como local), a las órdenes de Marcelo Plá, y entre el 27 de enero (77-85 vs. Atenas en Córdoba) y el 22 de febrero de 2017 (66-85 vs. Libertad en Sunchales), dirigido por Marcelo Richotti.

Un triunfo ante Estudiantes de Concordia evitará esa marca negativa. En relación a ese cotejo, difícilmente Peñarol pueda contar con Nicolás Lauría (necesita una semana más de kinesiología) y hoy por hoy es todo una incógnita qué pasará con Todd Brown, quien tiene un edema óseo en una de sus rodillas.

Es que el despido del extranjero, a raíz de sus problemas físicos, está decidido. Su aporte ante Instituto fue pobrísimo, apenas un punto y nada más que cuatro tiros de cancha. Si bien hace ya algunos partidos que juega con dolor a raíz de un edema óseo en una de sus rodillas, no habría contemplaciones para él.

“No podemos esperar a que se recupere. No tenemos tiempo. Necesitamos un jugador que esté al 100%, al 70 u 80% no nos sirve”, aseguró el dirigente Alejandro Amoedo.

“Y no hay cosas raras. Domingo le pagó el otro día. Está al día, no así el resto del plantel. Tenemos un atraso, como casi todos los equipos. Los muchachos se quejan y yo los entiendo. Antes les tirabas algo, vivían igual y ahorraban el resto. Porque, a la larga, todos cobran, esa es la dinámica de nuestra Liga. Pero hoy tienen más gastos y se les complica la economía familiar”, comentó.

Leonardo Gutiérrez y Domingo Robles, hoy por hoy, buscan un ayuda base que reemplace a Brown y un ala-pivote que ocupará la ficha libre que tiene el plantel.

La búsqueda, de todos modos, no es sencilla. “Tenemos varias tachaduras. Jugadores de nuestra Liga reservados por sus últimos equipos, imposible. Jugadores en competencia de las Ligas vecinas, también. Hoy Uruguay paga más que nosotros. Nuestro presupuesto es acotado. Pero intentaremos incorporar dos jugadores atléticos. Es lo que necesita el equipo”, sostuvo Amoedo.

La elección de esos dos jugadores, hoy, está en una etapa preliminar. Peñarol afrontará como está el partido ante Estudiantes de Concordia. Se hará lo imposible para sumarlos, al menos a uno de ellos, antes de la gira que el equipo emprenderá la semana que viene por el noreste del país, donde jugará lunes, miércoles y viernes ante La Unión, Regatas y San Martín, respectivamente.

Luego, entre el 26 de marzo y el 9 de abril, el elenco “milrayitas” jugará cinco partidos consecutivos en calidad de local. Cinco cotejos que, de algún modo, marcarán si el despegue es posible.