La Fiesta Nacional de la Vendimia tuvo su acto central en un Anfiteatro Griego Frank Romero Day de la ciudad de Mendoza colmado de turistas y público mendocino que enfrentaron las malas condiciones climáticas hasta la madrugada de este domingo, en la que fue coronada reina María Laura Micames, quien representó a San Carlos (Valle de Uco) y a Luz Mercol Pelandino, de Lavalle, como virreina.

Como consecuencia del cambio climático, frío y lluvia fueron inusuales protagonistas de la máxima fiesta de la “tierra del sol y del buen vino”, sin embargo se decidió no suspenderla, por lo que las agencias de turismo entregaron capas de lluvia descartables para enfrentar la adversidad meteorológica, a la vez que la TV Pública la transmitió en vivo en su ciclo Festival País.

El espectáculo “Tejido en Tiempo de Vendimia” contó con una puesta en escena multitudinaria con 852 artistas, 208 bailarines contemporáneos, 344 bailarines folclóricos, 30 bailarines con discapacidad, 185 actores, 15 acróbatas aéreos, 18 acróbatas de piso y un ensamble integrado por 52 músicos y cantantes.

Bajo la dirección general de Alicia Casares, representó un día de cosecha en Mendoza, cuyos principales temas fueron el amor y el trabajo vitivinícola, que se fueron desplegando en 17 cuadros en los que se entretejió el romance con el trabajo de la tierra, hilvanado por los cosechadores José y Mariela, que bajo la atenta mirada de un narrador, vivieron intensamente la experiencia de la cosecha.

La música a cargo del maestro Mario Galván combinó ritmos tradicionales como el malambo o la cueca con otros urbanos, “tecno” y populares.

La novedad fueron las pantallas de animaciones y los videos artísticos, que contaron con animación 3D y 2D, mientras que para las transiciones se apeló al recurso del teatro de sombras, que combinaron lo tradicional con lo contemporáneo; y también se utilizaron pantallas LED animadas, y cajas de luces.

La escenografía digital supo combinar tecnología y arte para resolver una propuesta de trabajo recreando el escenario en una bodega en pleno funcionamiento, y también aparecieron los viñateros con aire europeo, representando a los inmigrantes que levantaron sus bodegas y viñedos a fuerza de trabajo y fe en estas tierras.

Se apeló a tocar las fibras del espectador cuando se escuchó el famoso ‘Brindis’ de La Traviata’ (“Libiamo ne’ Lieti Calici, La traviata”) cantado en vivo por Mariano Leotta y Griselda López Zalba.

No faltaron las plegarias a la Virgen de la Carrodilla, patrona de viñedos, cuando la tormenta de granizo, como negra amenaza, dio pie para ruegos en lenguas originarias.

La nueva soberana vendimial, María Laura Micames tiene 20 años y estudia Trabajo Social en la facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNCuyo.