Con diez nominaciones en los premios Oscar que se entregan este domingo, incluyendo mejor película, mejor director, mejor guión y mejor fotografía, “Roma” del realizador mexicano Alfonso Cuarón no solo es la favorita de esta ceremonia, sino que contribuye a consolidar a Netflix como jugador importante en el mercado cinematográfico y al streaming como canal de distribución válido para el cine de calidad.

En esta edición, la número noventa y uno y la segunda que se realiza tras la fuerza del movimiento feminista #MeToo, se destaca la ausencia de un presentador en la gala y la presencia de mucha música en la ceremonia.
El Teatro Dolby, en pleno corazón del Paseo de la Fama en Los Angeles, albergará desde las 17 horas (1.00 GMT del lunes) la ceremonia de unos Oscar marcados por los tropiezos de la Academia de Hollywood, que tuvo que renunciar a ideas tan controvertidas como entregar una estatuilla a la mejor película popular o presentar algunos galardones en las pausas publicitarias.

Las cintas que pugan por quedarse con el premio mayor, el de mejor película, son además de Roma, Rapsodia Bohemia, de Graham King, Black Panther de Kevin Feige, La favorita de Yorgos Lanthimos, BlacKkKlansman, de Spike Lee, Green Book de Peter Farrelly, Nick Vallelonga y Brian Currie, Vice de Adam McKay, Dede Gardner, Jeremy Kleiner y Ha nacido una estrella, de Bradley Cooper, Lynette Howell, Bill Gerber.

Los nominados a mejor director son Spike Lee, Pawel Pawlikowsky por Cold War, Yorgos Lanthimos, Alfonso Cuarón y Adam McKay. Y las intérpretes que integran la nómina de candidatas a mejor actriz son Yalitza Aparicio por Roma, Glenn Close por ‘Una Buena Esposa’, Lady Gaga por Ha nacido una estrella, Olivia Colman por La Favorita y Melissa McCarthy por Can you ever forgive me?

En tanto, los nominados a mejor actor son: Christian Bale por Vice, Bradley Cooper por Ha nacido una estrella, Willem Dafoe por Van Gogh, a las puertas de la eternidad, Viggo Mortensen por Green Book y Rami Malek por Rapsodia Bohemia.

“Red carpet”

Antes del arranque de la ceremonia, las estrellas comenzarán a desfilar por los 275 metros de “red carpet” o alfombra roja instalados en Hollywood Boulevard y que simbolizan el comienzo de una de las veladas más glamorosas del planeta.

Con la habitual carpa transparente para que las figuras del cine no pasen más frío del necesario, la alfombra roja será escrutada al milímetro por los 735 afortunados espectadores que podrán verla desde las gradas y por los 306 medios de comunicación que cuentan con acreditación para cubrir los Oscar.

Dentro del auditorio, con capacidad para 3.300 personas, llegará el turno de ver qué han decidido los 7.902 miembros de la Academia que tenían derecho a voto, según los datos oficiales difundidos por los organizadores.
En Argentina, se podrá seguir la ceremonia por la señal TNT, a partir de las 22.

Roma, otro circuito

El relato semi autobiográfico y en blanco y negro de Cuarón acerca de sus memorias de crianza en una casa de clase media netamente matriarcal en la colonia Roma de la Ciudad de México conquistó a buena parte del periodismo especializado y suena como la gran favorita para convertirse en la primera cinta de habla no inglesa en alzarse con el premio a mejor película.

La narración pone en foco a las empleadas domésticas, sectores históricamente invisibilizados en el cine mainstream. Y lo hace a partir del personaje de Cleo, que interpreta la actriz indígena Yalitza Aparicio.
Tanto por las polémicas que la envolvieron como por las elogiosas críticas y premios obtenidos, Roma fue -por lejos- la película más comentada de la temporada.

Una de las dimensiones que destaca a la película es el significado que tiene para la industria hollywoodense que la gran candidata del año sea completamente mexicana desde su concepción y su realización, y el fuerte mensaje que supone para Trump y su impulso al muro en la frontera sur del país.

Pero es otro de los aspectos más relevantes el que más polémica generó: el que la ubica como el caballito de batalla con el que Netflix combate los circuitos tradicionales de producción y consumo de cine. El filme se vio en algunos cine de Estados Unidos, pero no llegó a todas las pantallas grandes del mundo ni a las cadenas cinematográficas más importantes. Roma es la primera cinta original producida por Netflix, que de esta manera empieza a jugar fuerte en la industria del cine internacional.