BALCARCE (Corresponsal).- Docentes que se desenvuelven en escuelas rurales fueron convocadas por el municipio para asegurarles que a partir de este año se les asegurará que las fumigaciones no afectarán el normal desenvolvimiento de las clases.

Es a partir de la resolución 246/18 del Ministerio de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires determina además que el profesional que verifique la aplicación tendrá facultades para determinar la suspensión de la misma si así lo considera conveniente.

A cargo de la disertación estuvieron el director de Gestión Ambiental, Pedro Platz, que es el encargado de que se desarrolle la medida en el distrito y la Ing. Analía Alonso, inspectora fitosanitaria de la Dirección de Fiscalización Vegetal del Ministerio de Agroindustria de la Provincia de Buenos Aires.

En la actualidad, los empresarios agrícolas bonaerenses que deban realizar aplicaciones terrestres de agroquímicos en “zonas de amortiguamiento” deberán contar con “la presencia del profesional interviniente que determine las previsiones a tener en cuenta al inicio y durante la aplicación”.

La resolución define que deberán considerarse las siguientes “zonas de amortiguamiento”: área de población dispersa, área urbana y residencial extraurbana, campo de bombeo o batería de pozos (perforaciones utilizadas para la explotación del recurso hídrico subterráneo cuyo fin es el abastecimiento público) y zonas contiguas a los cuerpos o cursos de agua que no forman parte del lecho del mismo.

En ese marco, aparecen las escuelas rurales.

La resolución 246/18 del Ministerio de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires determina además que el profesional que verifique la aplicación tendrá facultades para determinar la suspensión de la misma si así lo considera conveniente.

Bajo el lema “Protección profesional de escuelas rurales” se desarrolló una jornada de capacitación en la aplicación de fitosanitarios para llevar “tranquilidad” a los docentes, como definió Platz.

El funcionario resaltó que “debemos llevar tranquilidad a las escuelas en el sentido de que en este caso un ingeniero agrónomo estará presente en la aplicación de los productos. Será quien esté monitoreando el proceso”.

Asimismo, mencionó que “en la actualidad se hace un trabajo idóneo, a diferencia de lo que se realizaba antes que se hacía casi sistemáticamente”.

Platz indicó que en los lotes linderos a las escuelas un profesional resolverá al momento de la aplicación. Este será fuera del horario de funcionamiento del establecimiento educativo y bajo las condiciones meteorológicas correctas. Es decir, que no se hará la aplicación en momentos en que el viento hacia el sentido de ubicación del inmueble.