La Superliga avanzó en las últimas horas en charlas para implementar la tecnología en el fútbol argentino, aunque diversos obstáculos hacen que todavía no esté claro si la misma llegará para la próxima temporada.

Según supo NA de fuentes cercanas al ente que organiza los destinos del fútbol de Primera División, su presidente Mariano Elizondo se reunió esta semana con uno de los ejecutivos de la empresa que brinda el servicio en el tenis, conocido como “Ojo de Halcón”, para saber diversos detalles.

El VAR, que ya se implementa en algunas ligas del mundo y se utilizó en algunas instancias definitorias de las Copas Libertadores y Sudamericanas, es un pedido de las autoridades arbitrales que cuenta con el respaldo de la Superliga.

Claro que su desembarco no es sencillo debido a que su alto costo económico, que es en dólares, en un país que no ha mostrado estabilidad cambiaria en los últimos meses.

Cerca de ocho empresas son las que tienen la licencia autorizada por FIFA para proveer el servicio tecnológico y muchas de ellas no están presentes en Argentina.

La intención de la Superliga es que el VAR funcione de manera similar a como se da en España, donde todos los elementos están afincados en el predio de Las Rozas, que es de la Real Federación Española.

Desde allí, llegan en tiempo real todas las cámaras de los partidos que se disputan en los diversos estadios y los encargados de operar el VAR analizan las jugadas polémicas y se encargan de comunicarse con los árbitros de cancha.

Si bien no trascendió dónde estaría ubicado ese lugar en Argentina, la primera traba es que en tres canchas no existen fibras ópticas para que las imágenes vayan en tiempo real hasta el lugar designado.

En esos estadios, que son los de San Martín de San Juan, Patronato y Defensa y Justicia, sería necesario que exista un camión de exteriores con toda la tecnología allí mismo.

Según una estimación efectuada hace un tiempo por la Superliga, el uso del VAR en cada partido significaría dos mil dólares pero con la modalidad de colocación de un móvil de exteriores en cada encuentro.

Si se logra implementar un sistema similar al español, se estima que los costos se abaratarían ya que salvo las citadas excepciones todo se manejaría desde un mismo sitio.

Si bien en la semana el Director Nacional de Arbitraje de la AFA, Federico Beligoy, indicó que la intención es que “la tecnología llegue en la temporada 2019-2020”, desde la Superliga están trabajando para lograrlo, aunque nadie se anima a vaticinar plazos.