El incendio en Caromar no fue intencional. Tampoco fue producto de un sabotaje o un ataque desde el exterior. Lo que inició el inciendo del mayorista de artículos de limpieza el martes de la semana pasada fue un simple accidente mientras se cargaba un autoelevador.

Así surge del informe que los peritos de Bomberos entregaron al mediodía a la Fiscalía de Delitos Culposos después de una semana de trabajos sobre los escombros del predio ubicado en Salta y Falucho.

Ahora desde el Ministerio Público se analizará el reporte que incluye el origen del fuego, el cual pudo ser determinado con relativa certeza debido al estado de destrucción total de las instalaciones. Fuentes extraoficiales indicaron que la causa fue un desperfecto mientras era cargado con suministro eléctrico un autoelevador conocido popularmente como “sampi”.

Ayer los bomberos Mar del Plata, bajo las órdenes del jefe Alberto Gabba, terminaron con las tareas y ahora es el tiempo de la firma para iniciar las tareas de demolición y limpieza final. Para ello se necesitan algunas autorizaciones municipales que ya están en trámite.

Al respecto se conoció que la estructura, aunque no cedió, se vio debilitada al punto que se declaró su sentencia tras la inspección de los peritos: debe ser demolida en su totalidad.