TEL AVIV, Israel.- La cancillería israelí aseguró este martes que su país se encuentra “bajo ataque”, mientras el Gabinete de Seguridad se reunió durante cuatro horas para abordar la última escalada de violencia desatada en la Franja de Gaza y el sur de Israel, que hasta el momento dejó siete muertos y casi un centenar de heridos.

“Israel no acepta y no aceptará estos ataques deliberados contra civiles israelíes y serán respondidos por fuertes y mortales ataques del Ejército”, aseguró el portavoz de la cancillería, Emmanuel Najshón, en un comunicado.

Los bombardeos a gran escala contra objetivos militares a lo largo de la Franja de Gaza son una respuesta al lanzamiento de 400 proyectiles desde el lunes por la tarde, que continuaron esta mañana, y que activaron las alarmas en las comunidades israelíes periféricas, aseguró el funcionario.

“Recientemente, el Ejército completó un ataque contra un objetivo militar estratégico clave, el cuarto de su tipo atacado por el Ejército desde ayer por la noche”, expresó un comunicado militar, y detalló que se trata de un edificio que sirve como sede de inteligencia de Hamas, con un almacén de municiones, informó la agencia de noticias EFE.

Al menos 100 de los misiles disparados desde la Franja fueron interceptados por el sistema defensivo Cúpula de Hierro, pero uno de ellos mató a un civil de 48 años en Israel, y otro hirió a una mujer que se encuentra en estado crítico, mientras otro soldado israelí herido de gravedad está estable, según Maguen David Adom (equivalente a la Cruz Roja).

Los bombardeos israelíes, en tanto, han alcanzado 150 objetivos y provocaron la muerte de cinco palestinos, informaron fuentes médicas palestinas.

Un sexto hombre, un palestino de 26 años, murió esta mañana y el portavoz del Ministerio de Salud, Ashraf al Qedra, reportó otros 15 heridos, informó la agencia de noticias palestina Maan.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el titular de Defensa, Avigdor Lierbeman, se reunieron con el Gabinete de Seguridad para evaluar la situación, señaló un portavoz ministerial, ante los temores del inicio de una nueva guerra.

Las milicias palestinas reivindicaron el inicio ayer de los ataques como respuesta a la muerte de siete milicianos en un enfrentamiento dentro de Gaza, durante una operación de las fuerzas especiales israelíes desarrollada el domingo, en la que también murió un oficial israelí.

El gobierno alemán condenó enérgicamente el lanzamiento de centenares de cohetes de parte de los palestinos y advirtió por el peligro de que el conflicto entre en una espiral imparable.

“Condenamos enérgicamente este ataque con cohetes. No puede haber justificación para esta violencia contra civiles inocentes. Siempre hemos subrayado el derecho de Israel a defender su seguridad y responder a ataques de forma apropiada”, señaló la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores alemán en un comunicado.

Esta nueva escalada de violencia, una de las peores desde la ofensiva de Israel contra Hamas de 2014, se produce cuando se esperaba lograr una tregua de larga duración que negociaban de forma indirecta las milicias palestinas e Israel, con la mediación de Egipto y el apoyo de la ONU.