Los planteles de Boca y River, después de tener un día de descanso este domingo, comenzarán este lunes la preparación de la serie final de la Copa Libertadores, cuyo primer partido será el sábado próximo en La Bombonera, en el Súper Choque que definirá el campeón del máximo certamen del fútbol continental.

El panorama para el entrenador, Guillermo Barros Schelotto, parece un poco más despejado que el de su colega, Marcelo Gallardo, en cuanto al armado de la formación titular.
Los jugadores de Boca fueron citados hoy las 9.30 en el predio de Casa Amarilla para iniciar la semana de trabajo.

A excepción del arquero Agustín Rossi, la goleada de anteanoche ante Tigre (4-1) por la Superliga no incluyó a ningún jugador de campo en relación con la semifinal revancha con Palmeiras de Brasil (2-3), el miércoles pasado.

Barros Schelotto quiso darle descanso a los futbolistas titulares en el Allianz Parque de San Pablo, lo que se tomó como un indicio de lo que planea para el Superclásico como local.

De manera que tanto el atacante colombiano Emanuel Villa como el centrodelantero Ramón “Wanchope” Abila se perfilan con ventaja para conservar su lugar entre los once en desmedro de Mauro Zárate y Darío Benedetto, el jugador decisivo de la serie con Palmeiras.

Sucede que Zárate, la contratación de Boca en el último receso, bajó su rendimiento en los últimos partidos y Villa se hizo un espacio en base a su velocidad, que lo convierte en un jugador desequilibrante en ofensiva y también importante para ocupar espacios en el retroceso.
Lo de Benedetto pasaría más por la idea de aprovechar su buen momento como “jugador número 12”.

Es que el “Pipa” tuvo un ingreso triunfal en la primera semifinal (2-0) cuando anotó los dos tantos después de una sequía personal de casi un año, formula que repitió en San Pablo con la conquista del 2-2 definitivo.

El resto de la formación no presenta dudas y sólo quedaría por resolver si el módulo táctico elegido es el 4-3-3 habitual en La Bombonera o el 4-1-4-1 utilizado en Brasil, con Wilmar Barrios como contención detrás de una línea media con Villa y Pavón por los costados.

Así, la formación de Boca sería con Rossi; Leonardo Jara, Carlos Izquierdoz, Lisandro Magallán y Lucas Olaza; Nahitán Nandez, Wilmar Barrios y Pablo Pérez; Villa, “Wanchope” Abila y Pavón.
River, en cambio, tiene un problema importante que resolver: el reemplazo de su capitán Leonardo Ponzio, que no podrá jugar por una lesión en el bíceps femoral derecho en el partido revancha con Gremio de Porto Alegre.

El experimentado mendocino Enzo Pérez, mundialista en Brasil 2014 y Rusia 2018, es su sustituto natural, pero Gallardo tendría pensado reforzar la contención en la mitad de la cancha con la inclusión de Bruno Zuculini en lugar de Ignacio Fernández, de pálido presente.

Además, en relación a la semifinal, Gonzalo “Pity” Martínez recuperaría su lugar entre los titulares por el colombiano Juan Fernando Quitero.

En la delantera, Gallardo tiene que resolver si dispone a Ignacio Scocco, que ayer abandonó el partido con Estudiantes de La Plata con una sobrecarga muscular en el gemelo derecho, o si mantiene la dupla Rafael Santos Borré-Lucas Pratto.

Una probable formación para visitar La Bombonera sería: Franco Armani; Gonzalo Montiel, Jonatan Maidana, Javier Pinola y Milton Casco; Exequiel Palacios, Pérez, Zuculini y “Pity” Martínez; Santos Borré y Pratto.

River visitará el sábado a Boca sin Gallardo, quien no podrá asistir al estadio por la sanción impuesta por la Conmebol, y con seis jugadores al límite de amonestaciones: Maidana, Pinola, Enzo Pérez, “Pity” Martínez, Santos Borré y Pratto.

En Boca son cuatro futbolistas los que tiene riesgo de perderse la revancha si reciben la tarjeta amarilla el sábado: los uruguayos Olaza y Nandez; Pablo Pérez y Pavón.

La superfinal de la Copa Libertadores 2018, que finalmente se jugará sin público visitante, tendrá su primer capítulo el sábado desde las 16 en La Bombonera, con arbitraje del chileno Roberto Tobar, y su revancha el sábado 24 a la misma hora en el estadio Monumental.