“De cara al presente. Revisitar el pasado. Imaginar futuros inéditos” será el tema de la próxima edición de La Noche de las Ideas, evento que volverá a realizarse en Mar del Plata. Esta vez, llegará el verano próximo, el 1 y 2 de febrero de 2019 en el Museo MAR. Y unos días antes se desarrollará en la ciudad de Ostende, en Pinamar, el 30 y 31 de enero en el histórico Viejo Hotel Ostende.

La dinámica del evento permite vincular a una gran cantidad de profesionales de diversos ámbitos con un público interesado en interactuar con los conferencistas y en reflexionar sobre el eje de cada edición. Así, se convierte en una invitación a reflexionar sobre el presente, al tiempo que permite conectar saberes que parecen desvinculados en una primera instancia.

“No es una conferencia más, no es una charla más, La Noche de las Ideas es una experiencia”, resumió Yann Lorvo, consejero de cooperación y de acción cultural de la Embajada de Francia en Argentina. Justamente, la propuesta es una iniciativa de la Embajada de Francia en el país, del Instituto Francés Argentino y del Diálogo Franco Argentino.

Integrantes del equipo organizador estuvieron recientemente en Mar del Plata para cerrar detalles del evento, que movilizará a sesenta personas, entre conferencistas y miembros de la organización y que buscará superar las cifras que, en 2017, reunió la actividad.

Nueve mil personas participaron de La Noche de las Ideas que también se realizó en esta localidad y en Pinamar durante el verano pasado. Ahora, el desafío es ir más allá de ese guarismo e instalar al evento en la nutrida agenda de propuestas del verano bonaerense.

“Son dos días en los que proponemos un fuego de artificio de ideas”, agregó Lorvo. Recordó que durante la edición de este año participó el colectivo Trimarchi en representación de Mar del Plata y destacó que el evento se realiza merced el apoyo de los gobiernos nacional, provincial y de la ciudad, junto con la Universidad Nacional de Mar del Plata.

Los invitados

Desde Francia, llegarán a Mar del Plata el historiador Patrick Boucheron, el astrofísico Jean-Philippe Uzan, la filósofa y académica Bárbara Cassin, el escritor y periodista Olivier Guez, la historiador y actriz Málenie Traversier y el escritor Olivier Marchón.

Por su parte, la lista de participantes argentinos es más extensa. Incluye al historiador del psiconálisis Alejandro Dagfal, al actor Esteban Feune de Colombi, al cienítico Diego Golombeck, a la performer Mariana Belloto, al performer Marc Caellas, al director de teatro Emilio García Wehbi, a la actriz Maricel Alvarez, al músico Brian Chambouleyron, a la bailarina Francesca Fedrizzi, a la bailarina Marina Tampini, a la performer Nicola Costantino, al director del Museo de Bellas Artes Andrés Duprat, al ensayista y editor Alejandro Katz, al profesor de literatura Mariano Sverdloff, a la docente de literatura Magdalena Cámpora, al especialista en nuevas tecnologías Joan Cwaik, a la performer Alejandra Radano, a la historiadora Marina Franco, a la escritora Silvia Hopenhayn, a los caricaturistas Tute y Rep y a la docente de literatura María Negroni.

Los marplatenses que participarán como conferencistas serán el psicoanalista Juan Eduardo Tesone y al politólogo Lucas Martín.

“El público que participa es muy heterogéneo, el lenguaje está al alcance de todo el mundo y lo que se genera no es solo una charla magistral, es un debate en el que interviene el público”, acotó Juan Eduardo Tesone, el marplatense que participará de esta edición y que acompañó al equipo organizador durante la estadía en Mar del Plata.

Cabe señalar que además de Lorvo, estuvieron recorriendo Mar del Plata Guillaume Boccara director del Centro Franco Argentino y Leandro Frías, encargado de la producción del evento.

Para Lorvo, cada encuentro propicia la hospitalidad. “Los conferencistas vienen, los hospedamos, almorzamos y cenamos juntos, mucha gente que no conocía se encuentra y genera mucha complicidad, nosotros rompemos esta verticalidad que hay en la vida proesional, y proponemos horizontalidad: el editor charla con el psicoanalista, con la actriz o con el performer. Es un espíritu que llegamos a transmitir al público”, indicó y sostuvo que los espectadores encuentran espacio en la interacción con los disertantes y con sus propias ideas. “Se abren a una charla, a un diálogo, es una manera de pensar la democracia”, sostuvo.