Un joven de 22 años acusado de haber cometido una serie de robos en casas de Mar del Plata entre septiembre de 2017 y marzo de este año fue condenado a 3 años y 6 meses de prisión.

En un juicio abreviado celebrado en el Tribunal Oral en lo Criminal N°1, el juez Aldo Daniel Carneval condenó a Damián Agustín Sánchez (22) por dos casos de robo triplemente agravado por ser cometido en lugar poblado y en banda, por ser cometido con efracción y por escalamiento, un hurto en grado en tentativa y una violación de domicilio.

En los cuatro hechos por el que se lo juzgó Sánchez repitió la manera de operar: siempre tenía al menos un cómplice y con agilidad y sigilo, aprovechaba horarios nocturnos para trepar rejas perimetrales e ingresar a las viviendas.

Una de las principales pruebas para condenar a Sánchez, fue que en uno de los robos olvidó sus dos teléfonos personales en la casa de las víctimas. Además, en los otros tres hechos, fue detenido en flagrancia por la policía, por lo que durante el juicio abreviado la participación del imputado nunca fue puesta en dudas.

Sánchez fue condenado a 3 años y 6 meses de prisión.

El primero de los robos por el que se condenó a Sánchez ocurrió el 9 de septiembre del año pasado, cuando el imputado y otros dos sujetos, cerca de las 2 de la madrugada, escalaron la reja perimetral de una casa en Carasa al 4200 y, tras forzar una ventana, ingresaron a la vivienda.

En el interior de la casa despertaron a los golpes a una pareja que dormía en uno de los cuartos. El hombre intentó defenderse, pero recibió golpes de puño que le ocasionaron hematomas y cortes en el cuero cabelludo. Los delincuentes, tras conseguir 500 pesos, una billetera y una alianza de oro huyeron del lugar.

Fue tal el apuro por irse del lugar de Sánchez que no notó que en la habitación se dejó un destornillador, una bufanda, un handy Motorola Nextel y un celular Nokia.

Los investigadores analizaron los elementos y encontraron en el celular Nokia un mensaje de texto de un contacto agendado como “Dani” que decía: “Buen día Damián ¿qué pasó?”. Para los que realizaron las pesquisas, no hay dudas que ese “Damián” no es otro que el imputado, Damián Sánchez.

Por otra parte, luego de analizar el handy Nextel, los investigadores encontraron una foto de Sánchez y desde la empresa confirmaron que el equipo estaba registrado a su nombre.

Veinte días después de ese robo, cerca de las 22, Sánchez y otros dos hombres saltaron la reja de una casa en Marcelo T. de Alvear al 3400 y ingresaron a la propiedad. Forcejearon una ventana del frente pero, al ser advertida esta maniobra por las personas que estaban en el interior, los delincuentes se dieron a la fuga.

Las víctimas llamaron al 911 y un patrullero recorrió la zona y, en Cerrito en dirección a la 69 avistaron a los delincuentes y los redujeron, entre ellos se encontraba Sánchez.

El tercero de los hechos se registró el 24 de febrero de este año cerca de las 23, cuando Sánchez, y otro sujeto, escalaron una reja de unos dos metros e intentaron ingresar a una vivienda en San Lorenzo al 4300.

En esta oportunidad, un vecino vio la situación y llamó a la policía. Inmediatamente uniformados llegaron al lugar y al ver a un hombre en actitud sospechosa dentro del patio de la vivienda lo entrevistaron. El sujeto era no otro que Sánchez, quien le dijo a los oficiales que estaba “buscando” a su abuela. La excusa no sirvió y quedó detenido, pero fue suficiente para darle unos minutos a su cómplice, quien alcanzó a escapar por el fondo de la vivienda ante la vista de la policía.

El último robo frustrado de Sánchez ocurrió el 28 de marzo a la medianoche. El imputado y otro sujeto llegaron en una moto Rowser 200 hasta Arana 5300 del barrio Parque Peña e ingresaron al patio de una vivienda.

Sánchez no pudo robar nada por razones ajenas a su voluntad y, tras unos minutos, huyó antes de que llegara la policía. Un patrullero, alertado por el robo en curso, fue hasta la zona e interceptó a los delincuentes que intentaban fugarse en una moto.