La Facultad de Ingeniería, a través del grupo de extensión “Energías, una alternativa social”, integrado por docentes y alumnos de esa casa de estudios, presentó un prototipo de calefón social destinado a hogares habitados por familias en situación de alta vulnerabilidad.

El proyecto, encabezado por el ingeniero Ricardo Zucal, cuenta con apoyo de la empresa EDEA, y se lleva adelante en articulación con el programa “Hábitat y Ciudadanía” de la Facultad de Arquitectura.

“Nuestro objetivo es ver a las energías alternativas como una solución social en nuestra Mar del Plata que tanto lo necesitan”, señaló Zucal sobre la iniciativa que busca idear un dispositivo para calentar agua con la luz solar.

Sobre el funcionamiento del mismo, Zucal aseguró que, si bien están atados a la naturaleza, y no es lo mismo en primavera y en verano, lograron constatar que el aparato realmente funciona correctamente. “Por ejemplo, en los meses de primavera y verano funciona exactamente igual que un termotanque, pudiendo llegar hasta los 60° en un día soleado”, señaló.

Los materiales requeridos para la construcción de los calefones, según mencionó Zucal, consisten en “12 metros de cañerías de polietileno de 1 1/12 pulgada con sus correspondientes piezas de interconexión, una chapa galvanizada N°28 de reflexión, un armazón de madera fenólica cubierta de pintura de protección, material aislante de poliuretano expandido, y un elemento traslúcido de cierre (vidrio o policarbonato)”.

Del proyecto también participaron dos alumnos de la universidad, Facundo Gianetti y Daniel Vérniz, quienes compartieron con LA CAPITAL su experiencia. “Comenzamos a participar de esta actividad a principio de año y si bien tiene una razón académica, ya que nos permite cumplir ciertos requisitos como horas de práctica profesional o mismo el trabajo final, también tiene una razón social, que es muy importante”, señaló Vérniz.

También el alumno aclaró que, hasta el momento, no se han realizado pruebas en ninguna vivienda, pero el dispositivo sí fue instalado de manera experimental en la terraza de la Facultad sita en Juan B. Justo y Pampa, lo que sirve para evaluar el rendimiento técnico y económico del colector.

El decano de la facultad, Guillermo Lombera, también se mostró orgulloso con el proyecto llevado adelante por los alumnos y el docente. “De nada sirve ofrecer conocimientos y saberes, si esos conocimientos y saberes no se transmiten a la sociedad en general”, señaló.

El apoyo de EDEA

Por otra parte, Esteban Pérez Elustondo, gerente general de EDEA, señaló que “es nuestra intención, de manera conjunta con los docentes y alumnos tanto de la Facultad de Ingeniería como de Arquitectura, llevar adelante un proyecto participativo especialmente sensible a la situación de vulnerabilidad de las familias en situación de extrema pobreza e indefensión”.

“Para ello -dijo- apoyamos el desarrollo de sistemas de producción de energía con materiales alternativos que favorezcan la generación de emprendimientos como estos”.

Además de la construcción del dispositivo, la iniciativa contempla la realización de talleres para que los propios vecinos puedan construir con materiales económicos y reciclables sus calefones solares.

El primero de los talleres se está llevando a cabo en el barrio Monte Terrabusi, en la sede de una ONG donde habrá de instalarse el primero de los calefones construidos en forma colectiva.

Cabe destacar que esta organización cuenta entre sus directivos a Oscar Aguirre, uno de los primeros emprendedores comunitarios surgidos del programa “Hábitat y Ciudadanía”, que lidera el arquitecto Fernando Cacopardo.